Suben, bajan, se contorsionan; quedan tendidas en el aire, dan volteretas y detienen la caída libre a escasos milímetros del piso. Se estiran en sensuales formas, abriendo brazos y piernas y luego abrazan el largo tubo como si fuera el tesoro más preciado.
Lo que empezó en los 80’s como un baile erótico y se vio en los circos y las carpas con un tinte más “artístico”, es cada vez una práctica más recurrente entre mujeres que quieren guardar la línea. Ahora resulta que esos movimientos que encienden la sangre de los que acostumbran visitar los night clubes, es una de las prácticas deportivas más completas.
Las mujeres que lo desarrollan, salvo sus “honrosas” excepciones convertidas en memes en las redes sociales, esas a las que les gana el peso, la falta de equilibrio o de pericia, son unas verdaderas atletas que dominan el difícil arte del tubo.
Dominar el tubo no es fácil: quienes lo practican deben tener una gran fuerza en sus brazos y manos, así como en el vientre y las piernas, para sostener su propio peso en los ascensos, los descensos, los giros, contorsiones y demás movimiento.
La etiqueta de danza erótica, aunque su práctica sigue siendo el común denominados en los night clubes, comienza a quedar atrás y ganan terreno los motes de gimnasia o ejercicio aeróbico y anaeróbico. Ahora resulta que bailar el tubo es practicar una completísima combinación de ejercicios aeróbicos, yoga, pilates, danza y gimnasia.
El pole dance ya tiene dominada Europa y se expandió a América escalando grandes peldaños; en México, por ejemplo, ya hay hasta Federación Deportiva de este práctica, fundada en el 2010 y dedicada de lleno a fomentar la práctica de este, ahora, deporte, sin importar las condiciones físicas, flacas o gorditas, altas o chaparritas, de las interesadas. Sólo se ocupa ganas y práctica para adquirir la técnica.
El próximo 12 de febrero, Morelia será sede del campeonato regional del sudoeste Pole Sport 2016.
Los organizadores calculan la participación de más de mil 600 mujeres, y hombres, procedentes de los estados de Guanajuato, Jalisco, Colima, Guerrero, Nayarit y por supuesto Michoacán. La mira de estos competidores será el Campeonato Nacional a celebrarse en próximas fechas, que en el 2015 se realizó con gran éxito en Naucalpan, Estado de México, abarcando las categorías infantil, juvenil, amateur y profesionales, entre otras, en femenil, varonil y mixta.
Practicar pole dance es de gran beneficio: queman hasta 500 calorías por clase, mejora el sistema vascular, aumenta flexibilidad y coordinación, mejora resistencia y la tonicidad muscular, moldea la figura, corrige postura, mejoran control del cuerpo, aumenta la autoestima y ayuda a quienes la practican, a desinhibirse y por tanto, la mujer se vuelve más segura en su atractivo. Así que, ¡a practicar se ha dicho!