Bernard “Bernie” Sanders, senador por el estado de Vermont, su candidatura a la presidencia de los Estados Unidos por el partido demócrata toma gran revuelo en un momento crucial en el que la campaña de Hillary aparece desgastada no sólo en medios sino también en propuestas.
Su lema de campaña es “¿Estás listo para iniciar la revolución?” y ha logrado muchos seguidores en poco tiempo desde que anunció su primer video promocional en julio del año pasado. Bernie Sanders es considerado “un democrático socialista” pero que en realidad, tiende más hacia las políticas de corte social que se contraponen radicalmente a las exigencias republicanas.
Con argumentos como “Si trabajas más de 40 horas a la semana y no te alcanza el sueldo, vota por mí”, “Les digo algo a los multimillonarios: no pueden tenerlo todo”, o bien “Es hora de que los Estados Unidos se unan al resto del mundo industrializado y les de seguro médico a todos como un derecho humano fundamental” ha logrado captar la atención de forma más eficaz entre las esferas de votantes demócratas que están rompiendo con la campaña de Hillary Clinton.
Sanders sería el primer candidato ciudadano 100%
La parte más controversial del discurso del senador Sanders tal vez se refiera, en sus palabras: “La creciente desigualdad en los Estados Unidos nos obliga a tener elecciones justas y eso significa la posibilidad de que las campañas también puedan ser financiadas por los ciudadanos”, una debate aún irresoluble del todo por el sistema político norteamericano.
Actualmente, el financiamiento a los partidos políticos en la Unión Americana se realiza a través de otros miembros del partido, organizaciones o grandes corporaciones, y por el gobierno, a través del dinero proveniente de los impuestos de los ciudadanos.
Las contribuciones de ciudadanos no está permitido de forma directa a menos que sea parte de un partido político o bien a través de las empresas. Incluso los candidatos pueden pedir una especie de permiso para que pueda recibir fondos adicionales de parte de ciudadanos.
Este debate sobre los candidatos sin financiamiento del gobierno ahora resurge en las democracias contemporáneas ya que se considera que el apoyo de corporaciones o de ciertos miembros influyentes ejerce una presión política sobre el candidato y puede ser cómplice de actos de corrupción por mantener cierto favoritismo. A esto se le conoce como práctica de “lobby”.
Bernie Sanders, de 74 años de edad, hasta ahora, ha financiado todo lo respectivo a su campaña y además, a través de su página en internet y sus redes sociales, pide contribuciones ciudadanas para seguir el camino de la “revolución del cambio”.
De lograrlo, se convertiría en el primer candidato ciudadano que contiende a la presidencia por afuera de los estándares convencionales del sistema electoral norteamericano.
El voto negro y voto latino con Sanders
Una parte de la campaña política de Sanders que es completamente innegable es la lucha del senador por los afroamericanos desde 1963, ya que asistió personalmente a uno delos discursos de Martin Luther King que, en sus palabras, lo marcó para toda su vida. Motivo por el cual, siempre ha luchado por iniciativas a favor de las minorías raciales durante toda su carrera.
Esta línea de discurso incendió a las multitudes el pasado 11 de enero de este año en un foro de debate racial en el estado de Iowa, cuando afirmó que “todos los niños blancos, negros o latinos deben tener acceso a la educación pública en el país más rico del mundo”.
Sanders dijo: “Lo que sucediendo en Estados Unidos durante los últimos 30 años es que la clase media está desapareciendo y el desempleo está al 10% en realidad. Pero el 51% de los afroamericanos con educación está desempleado. En vez de construir más cárceles y sistemas penitenciarios haré que todos los niños afroamericanos regresen a la escuela y tengan mejores oportunidades. La lucha por los derechos raciales sigue y es también mi lucha de toda la vida.”
Sanders también apoyaría las iniciativas de reforma migratoria que el presidente Obama ha dejado encaminadas.
Las promesas de campaña de Sanders —coordinadas por un excelente manejo de redes sociales —son radicales para muchos, pero también son las más atendidas en la actualidad y prometen una alternativa a la campaña de Hillary Clinton.
Sanders promete la revolución, y cada vez más ciudadanos norteamericanos, se convierten en sus seguidores.
Berniesanders.com
oag