Este domingo 13 de marzo, 12 millones de votantes elegirán reforzar el mandato del partido Unión Demócrata Cristiana encabezado por el canciller Angela Merkel.
El problema es que las opiniones y las preferencias está revueltas y se centran en un punto álgido: el manejo político de la crisis de migrantes.
Hace seis meses, la decisión de otorgarle el asilo político en Alemania a miles de migrantes de Medio Oriente varados en Budapest significó un importante bono político para el canciller. Sin embargo, la situación ha devenido en un factor de desestabilización política del sistema.
En septiembre del año pasado, el partido de Merkel tenía el 40% de preferencias en Baden-Württemberg, uno de los estados que celebrará elecciones este domingo, pero las recientes encuestas le han arrancado puntos hasta no poder diferenciar una tendencia.
Un partido nuevo formado por una coalición llamada “Alternativa para Alemania”, (AfD por sus siglas en alemán Alternative für Deustschland) ha subido hasta el 10% en las encuestas, tal como lo afirma un parlamentario del partido de Merkel, Hans-Günther Knaupp, según lo refiere el periódico británico The Guardian.
Ese mismo periódico, se refieren más declaraciones de miembros del partido de Merkel que están inconformes con su política a favor de los migrantes, de repartirlos y de otorgarles muchas facilidades, una política que ha sido desairada ampliamente por varios miembros de la Unión Europea.
De hecho, estar en contra de la política migratoria de Merkel es visto como un signo de rechazo político a su partido.
Por otra parte, se vislumbran otros escenarios políticos que favorecen ampliamente el mandato de Merkel. Muchos ciudadanos reconocen que el canciller Merkel es la única mujer que ha reconocido el derecho al asilo político como un derecho fundamental.
El manejo de la crisis política de Merkel le ha generado enemistades serias en la ultra derecha —ideología política arraigada en la Unión Europea actualmente— pero le ha generado bastantes simpatizantes de los partidos de centro y de izquierda.
De hecho, ya se habla de que es la única personalidad que sobresale como un verdadero estadista, una mujer comprometida 24 horas con la sociedad alemana, según lo referido por el periódico Süddeutshe Zeitung.
En una encuesta de Forsa de la semana pasada, Angela Merkel alcanzó más del 50% de las preferencias de los germanos por lo que las apuestas a que su partido arrase en las próximas elecciones son muy altas.
Este “súper domingo”, Merkel enfrentará la contienda electoral de cara a las decisiones de los votantes que podrían afianzar masivamente su mandato en Alemania.
The Guardian/Reuters
oag