Primero fue su actual esposa, Emma Coronel, quien se quejó de que su marido Joaquín el chapo Guzmán Loera era sometido a una rutina inhumana: no le permitían dormir y se habían acrecentado sus enfermedades— padece diabetes e hipertensión—. Sus abogados aseguran que ante las duras medidas de seguridad del reclusorio, urgía acelerar su extradición a Estados Unidos.

Hoy, su hija, Rosa Isela Guzmán Ortiz señala que su padre fue traicionado por políticos y narcotraficantes porque “hubo un pacto y no lo respetaron”.

Lo cierto, es que hay toda una estrategia para victimizar al capo — a cuya esposa no le consta que se dedique a las drogas y su hija dice que no es multimillonario, como publicó Forbes— que busca presionar al gobierno mexicano y buscar un acuerdo “favorable” con el gobierno estadounidense.

Entrevistada por el diario británico The Guardian, la hija mayor del líder del cártel de Sinaloa asegura que la fuga de su papá fue un acuerdo que “el gobierno no respetó” y ahora dicen que es un criminal “Pero no dicen cuando se les pregunta por el dinero para sus campañas”. ¡Son unos hipócritas!, reclama.

La hija mayor de Guzmán Loera— quien llegó a la entrevista en un automóvil Mercedes Benz, luciendo un rolex y una bolsa Louis Vuitton— manifiesta que su papá financió la elección de políticos de alto nivel en nuestro país y entró en dos ocasiones— en secreto— a Estados Unidos a finales de 2015, para visitar a su familia y ver la casa de 5 recámaras y un enorme jardín que le compró a ella y a sus cuatro hijos— dos de ellos, producto de su unión con Vicente Zambada Niebla El Vicentillo, —hijo del Mayo Zambada— y los que ha procreado con un sobrino de Juan José Esparragoza.

Cuando el reportero le cuestionó como lo había logrado Guzmán Loera cuando se trataba de uno de los narcotraficantes más buscados del mundo, Guzmán Ortiz de 39 años, sólo sonrió y dijo “Le pregunté lo mismo, creéme”.

La hija del Chapo —originaria de Sinaloa y quien maneja en California, pequeños negocios como son auto lavados, salones de belleza y cafés— aclara que su papá ya tenía todo listo para retirarse e incluso ya había planeado pasarle el negocio a Iván Archivaldo, su hermano e hijo del capo, pero fue traicionado por Ismael “El Mayo Zambada” y por el gobierno mexicano, quien presuntamente lo protegería.

En la entrevista con el diario, Rosa Isela, quien dice ser una narco junior —aunque puntualiza que el dinero que le enviaba su padre era limpio y su éxito es producto de su esfuerzo—, al parecer no se abordó el tema de la relación del narcotraficante con la actriz Kate del Castillo, quien sería la encargada de producir y realizar una película autobiográfica de Guzmán Loera.

Con Información The Guardian