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Si vemos el desastre de gobierno que ha hecho Mancera, difícilmente creo que pueda pensarse que sea el candidato de la izquierda.
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Entrevista a Alejandro Sánchez | Secretario de Acción Política Estratégica | Exclusiva Siempre!

 

Aun cuando el tema, en estos momentos, son los comicios del 5 de junio, en donde se renovarán 12 gubernaturas, tal parece, que este proceso de 2016 quedó rebasado ya desde hace mucho tiempo por la elección presidencial de 2018 “que, aunque está en el radar político, no está en la discusión central de las mesas”. No obstante, el PRD tiene ya al menos dos aspirantes que han levantado la mano para pelear la candidatura oficial de este partido en 2017. Uno de ellos es el actual gobernador perredista de Morelos, Graco Ramírez, y el otro es el jefe de Gobierno de la Ciudad de México, Miguel Ángel Mancera, que se niega o rehúsa afiliarse al Sol Azteca, pero que ha dicho claramente que sí quiere buscar abanderar a una “fracción” de la izquierda mexicana.

imer punto de llegada que al mismo tiempo es un punto de partida es el 5 de junio y el trabajo político está concentrado en atender y tener buenos resultados en este proceso que es lo urgente, lo cual no evita que a partir de esta fecha se profundice un debate nacional en torno a los escenarios de 2018. De tal manera que aunque hoy en plena campaña hay posicionamientos públicos respecto al 18, son ejercicios de debate aislados que sin duda tendrán una fuerza mayor a partir de junio.

La atención de la militancia “está en obtener éxito electoral en estos comicios de 2016, ahí están concentrados los diversos candidatos en los distintos cargos de elección popular, la atención de la dirección general está también en ese tema. Ahora bien, así como se ha postulado a Miguel Ángel Mancera, hay otros perredistas que piensan en Silvano Aureoles, otros más que incluso han autolevantado la mano como Graco Ramírez y algunos otros hablan de candidatos independientes, está en medios, en la opinión pública, reuniones con Jorge Castañeda, con El Bronco y con ese otro sector que va trabajando esa ruta, es decir, en estos momentos todas las propuestas son bienvenidas, ninguna se descarta, la moneda está en el aire, pero ese debate, esas decisiones políticas deberán tener un compás de espera por lo menos de aquí al 5 de junio y será a partir de esa fecha donde se proyecten los diversos escenarios hacia la Presidencia de la República”.

En este sentido, Alejandro Sánchez Camacho al menos ve dos escenarios, dos grandes bloques, más allá de los nombres de candidatos; un primer escenario es que será un debate muy fuerte en el interior del partido y que los órganos de dirección como un Consejo Nacional o Congreso tomarán el resolutivo final, la construcción de un frente político electoral de las izquierdas donde se encuentre el Partido del Trabajo, Movimiento Ciudadano, Morena y el PRD, con la figura que esté mejor posicionada en ese momento al 2018. Este es un primer escenario en el cual nosotros, me refiero a Izquierda Democrática Nacional, y una buena parte de la dirección del partido coincidimos.

Otro escenario, que se puede denominar la construcción de amplias alianzas electorales, contempla rumbo a 2018 alianzas del PRD con el PAN a la Presidencia de la República. “Ése es un escenario que al menos ha manejado otras expresiones del partido, por ejemplo “Galileo”. Sin embargo, este segundo escenario tiene dos matices: uno, que el propio Agustín Basave declaró hace algunas semanas, que no descarta “alianzas con el PAN y el PRD hacia la Presidencia de la República siempre y cuando el candidato sea externo, esto es que no sea una candidatura militante del PAN ni tampoco del PRD, un externo, ése es un matiz que lo encabeza Agustín Basave”.

El otro matiz —apunta el exlegislador— en este segundo escenario: “estamos hablando de amplias alianzas electorales, alianza PAN-PRD con un candidato orgánico, incluso ahí sí puede ser Margarita Zavala, puede ser Mancera, puede ser cualquier otro, entonces esto adquirirá un debate muy fuerte, muy intenso después del 5 de junio, y la resolución final de nuestro partido la tendrá que tomar el Consejo o el Congreso Nacional. Aquí a lo mejor se convoca a elecciones internas para renovar esos órganos, para elegir un nuevo Congreso, un nuevo Consejo Nacional o también puede ser el Congreso y el Consejo que actualmente están, no lo sabemos eso todavía, por eso esta discusión del 18 debe esperar el 5 de junio, porque pasarán acontecimientos que fortalecerán un escenario u otro.

Por esa razón para el miembro del Comité Ejecutivo Nacional perredista “todos los señalamientos que se han hecho antes del 5 de junio son respetables, son válidos, pero no deciden nada todavía, se reconoce el respeto, el derecho de todos los aspirantes, todos tienen posibilidad en este momento, nadie se descarta, pero después de los comicios se podrán perfilar más las definiciones”.

Sánchez Camacho se ríe y después responde a los trascendidos que afirman que Agustín Basave renunciará a la presidencia nacional del partido después de las elecciones del 5 de junio, sin importar los resultados en las urnas. Además de que su puesto lo ocuparía Beatriz Mojica o Miguel Barbosa. “Son varias ideas, las trato muy ejecutivamente, no hay de manera oficial en el Comité Ejecutivo Nacional, no hay tampoco de manera oficial ante IDN o ante mi persona el tema en la mesa de la renuncia de Agustín Basave, de pasillos sí, pues yo me enteré hoy por los medios, pero no se ha presentado oficialmente ninguna renuncia de Agustín Basave, hay que esperar.”

La sustitución en un momento dado de los órganos de dirección los tendrá que hacer el partido, el Consejo Nacional, entonces primero tendríamos que esperar a que se presentara la renuncia oficialmente y luego analizar la correlación de fuerzas que tiene el Consejo, y ahí las expresiones dominantes son Nueva Izquierda, es ADN, IDN, principalmente, ahí se tendría que consultar quién sería el sustituto, aunque no se descarta que pueda ser Miguel Barbosa, pero también puede ser Beatriz Mojica que ahorita es la secretaria general, que es de Nueva Izquierda y que tiene varios consejeros o también puede ser una propuesta del bloque donde está ADN. IDN, Foro Nuevo Sol, Vanguardia Progresista, Patria Digna y el CID, ésa también puede ser una propuesta y, en todo caso, además del análisis de la correlación de fuerzas del Consejo, lo primero sería conocer alguna renuncia, que por el momento no hay”.

Eso es en torno al partido, en cuanto a la ruta de la candidatura a la Presidencia de la República y que hay un activismo significativo para la de Miguel Ángel Mancera, nosotros reiteramos no es el tiempo aún de tomar estas definiciones, todas las candidaturas son bienvenidas, no se descarta ninguna, pero lo recomendable ahorita es concentrarnos en el 5 de junio, eso es lo fundamental”.

Además, agrega Alejandro Sánchez, de que el PRD debe llegar al 18 como un “partido vigente ante las demandas de la población en general, debe haber un PRD fresco, con sus programas sociales que dan muestra para un buen vivir de la gente, debe ser un PRD desvinculado con el crimen organizado y debe ser un PRD que luche contra la corrupción. Éstos serían algunos de los ejes que le deben dar vigencia al PRD rumbo a la Presidencia de la República”.

No obstante, el senador Alejandro Encinas en una entrevista con el diario Milenio acepta que “El PRD enfrenta la peor crisis de su historia… resultado del desdibujamiento ideológico, del pragmatismo político y del divorcio con las causas populares, que han convertido al partido que emergió de la lucha por la democracia, la lucha contra la represión y por la defensa de los derechos humanos. En un partido más dentro del régimen autoritario del país, incapaz de diferenciarse de la clase política que dice combatir, y que se ha subsumido en el laberinto de las partidocracias y los enredos de negociaciones a espaldas de la sociedad”.

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Veo mal y dividida a la izquierda: Gómez-Tagle

Por su parte, Silvia Gómez-Tagle, doctora en antropología por el Centro de Investigaciones y Estudios Superiores en Antropología Social, profesora e investigadora del Centro de Estudios Sociológicos de El Colegio de México, en entrevista con Siempre!, asegura que ve muy mal a la izquierda, la cual se encuentra dividida, pero rechaza que exista una izquierda radical y otra democrática “porque ni lo uno ni lo otro, la verdad Morena no es una izquierda radical, digamos que Andrés Manuel López Obrador es un poco altisonante en su discurso, pero para nada un político que tenga un proyecto radical. La otra izquierda, pues de democrática no tiene mucho. Ése es el problema, que ha ido perdiendo incluso dentro del propio partido los elementales compromisos con un proceso democrático, que son grupos con intereses particulares que se han ido posicionando en el partido y desplazando a liderazgos sociales más representativos”.

Ese papel de liderazgo con un proyecto de izquierda que tenía el PRD “lo fue perdiendo después de 2006, en parte porque se separaron del partido liderazgos importantes que podían darle un matiz más consistente, más congruente, y luego de 2012, con acciones muy pragmáticas que lo llevaron a renunciar a muchos de sus principios, como el Pacto por México con Enrique Peña Nieto, ahí fue cuando perdieron su identidad como un partido de izquierda, más bien se convirtieron en uno de los engranes del poder político, pero un engrane que no lleva el liderazgo, un engrane que está sujeto más que nada al proyecto del PRI y al del PAN”.

Además, “el perfil de los dirigentes del PRD ha quedado cada vez más opacado frente a situaciones en donde se ha comprometido con las decisiones tanto de la presidencia como de partidos que le son ajenos a la izquierda como el PAN, entonces no le veo al PRD una identidad clara como para liderar un movimiento que recoja las aspiraciones de la izquierda para 2018”.

La especialista en estudios de procesos políticos, democracia, transparencia, análisis electoral desde una perspectiva geográfica, expresa su opinión sobre la posibilidad de que el PRD lleve como candidato a la Presidencial de la República al jefe de Gobierno de la CDMX, Miguel Ángel Mancera, “es una gente valiosa, pero la verdad esas propuestas me parece que no garantizan hacia dónde puede ir el partido, si vemos el desastre de gobierno que ha hecho Mancera en la Ciudad de México, yo difícilmente creo que pueda pensarse que sea el candidato de la izquierda. No se le ve al gobierno de Mancera un rasgo que pudiera realmente decir, singularizarlo, como un excelente gobernante, si fuera de derecha o de centro o de lo que fuera no es excelente y mucho menos un gobierno de izquierda”.