Una mirada a… Somerset Maugham
“La redacción de un periódico tiene algo que parece atraer a personas de toda clase y condición en detrimento de la disciplina. Llegan las señoras misioneras que tratan de evangelizar a las mujeres indígenas que viven en la reclusión impuesta del purdah, y suplican al director del diario que abandone en el acto todas sus obligaciones para describir una entrega de premios de una asociación cristiana que tuvo lugar en un tugurio infecto de una aldea absolutamente inaccesible; aparece un coronel que ha sido relegado en el escalafón de mando, se sienta y esboza el contenido de una serie de diez, doce y hasta veinticuatro artículos de fondo sobre un asunto tan apasionante como es la antigüedad en el servicio frente a la selección arbitraria de los mandos militares… acuden en tropel los representantes de una compañía teatral que se han quedado sin recursos para explicar que no podrán pagar el anuncio de las funciones… A todo esto, en ningún momento deja de sonar enloquecido el teléfono, son asesinados los reyes en el continente, dicen los imperios unos de los otros que «eso lo será usted», y el señor Gladstone vierte un reguero de azufre sobre los Dominios Británicos, sin que los negritos de la imprenta callen ni un instante faenando como abejas cansadas, y griten a voz en cuello pidiendo texto para componer, mientras casi todas las planas del periódico siguen tan limpias como el escudo de Mordred…”, tomado de “El hombre que iba a ser rey”, en la antología de Somerset Maugham, El mejor relato del mundo y otros no menos buenos, editada por Sexto Piso.
Literatura de múltiples voces
Para Svetlana Alexiévich, Premio Nobel 2015, sus novelas de múltiples voces tomadas de entrevistas son sin duda un género literario: “La literatura ya no es algo inmóvil. Nuestra vida cambia cada vez más rápidamente. Ya no podemos esperar 50 años para procesar una historia, como hacía Tolstoi”. En una conferencia en Madrid, la escritora bielorrusa de 67 años, que ha tardado entre cinco y diez años en escribir cada uno de sus libros, los cuales contienen más de cien entrevistas, cuenta que ahora escribe acerca del amor, la vejez y la muerte.
El arte de escribir diálogos
Ahora que las novelas negras de Peter May (Glasgow 1951) se venden por millones (la más reciente Entry Island publicada por Salamandra), el autor que primero triunfó escribiendo guiones para series de televisión de la BBC, dice que una gran historia criminal “es la que lidia con los efectos que tiene un crimen en los individuos”, que la televisión le enseñó “que escribir un diálogo es un arte. Los grandes novelistas son grandes escritores de diálogos”, y que la lectura “es fundamental para la vida, tanto como comer y beber, porque alimenta el alma de una forma que las películas y la televisión no pueden” (entrevista de Maribel Marín, El País). Peter May vive en Francia dedicado a la literatura. Entre sus novelas policiacas de mayor éxito están la serie Misterios de China y la trilogía de Lewis de la cual forma parte El hombre sin pasado.