El secuestro virtual no es una nueva modalidad de extorsión telefónica, como lo acaba de asegurar la Secretaría de Gobernación. Sin embargo, es muy buena la idea de informar a cada segundo a la ciudadanía que este delito tiene un modus operandi en el que los delincuentes son capaces, incluso, de sacar a un niño de su casa y mandarlo a otras ciudades, de donde muchas de las veces ya no regresa. Lo mismo sucede con adultos.
Lo que sí es cierto es que conforme pasan los años, esta modalidad se ha convertido en un delito recurrente entre los criminales debido a que les implica menor riesgo de ser identificados o detenidos al no tener contacto directo con sus víctimas.
Cuando parecía que el control obligado -a través del registro único- en las líneas telefónicas y celulares era un atenuante para la comisión de este delito, las bandas de extorsionadores demostraron lo contrario.
Para conseguir su cometido, los delincuentes logran que la supuesta víctima salga de su domicilio a través del engaño telefónico: se hacen pasar por integrantes de algún grupo delictivo, gritan, intimidan y amenazan con dañar a algún familiar si no se siguen sus instrucciones.
Luego solicitan a la víctima apagar su celular y trasladarse a algún sitio específico (comúnmente hoteles), a donde le llaman para darle nuevas indicaciones.
Durante el tiempo en el que la persona se encuentra incomunicada, los delincuentes realizan llamadas a los familiares argumentando el supuesto secuestro con el objetivo de conseguir el pago de un “rescate”.
Es importante que la ciudadanía se informe, mantenga una actitud preventiva y tenga constante comunicación con sus familiares, estas medidas le ayudarán a no caer en el engaño de los delincuentes.
En caso de que se reciba una llamada similar, o alguna en la que se solicite un pago a cambio de no “secuestrar” a algún integrante de tu familia, la Coordinación Nacional Antisecuestro te recomienda:
- Identificar el número del que te llaman.
- Colgar de inmediato.
- Denunciar la situación a las autoridades.
Es importante señalar que los delincuentes son capaces de enganchar a una persona de cualquier edad, condición social o ideológica, en cuestión de segundos; muchas de esas llamadas provienen de cárceles en donde los perpetradores se alían con individuos del exterior de los penales.
Otras de las características más comunes y que se tiene que evitar, es que la víctima suele proporcionar datos personales en llamadas realizadas con anticipación a la llamada de extorsión. En esas interacciones telefónicas previas, se presentan a modo de encuestadores, empleados de bancos o aseguradoras y procuran hacer que la víctima crea que la información que se le solicita es necesaria y urgente.
Los delincuentes prefieren realizar las llamadas entre las 9 de la mañana y las 5 de la tarde. Son poco comunes las llamadas por la madrugada y suelen ser realizadas por delincuentes en libertad. Sólo el 5% de las extorsiones se hacen desde el exterior de los penales.
Incluso se ha detectado que empleados que tienen acceso a solicitudes de crédito para comprar autos o inmuebles, pasan datos de los solicitantes a reos extorsionadores, por eso es que si alguna persona recibe una llamada con fines de extorsión, debe colgar de inmediato y en caso de contestar no responder preguntas.
De acuerdo a www.mexicodenuncia.org el corte hasta el año 2015, indica que cada 24 horas se intentan 6 mil 800 extorsiones. El 30% de los afectados pagan la extorsión bajo las amenazas de supuestos integrantes de los grupos criminales de los cárteles de Los Zetas y La Familia Michoacana, lo que les representa un mayor impacto y por lo tanto lo que más ingresos produce a los delincuentes.
Dicho organismo indica que se ha detectado un incremento del 2% de bandas de extorsionadores que operan fuera de los penales, es decir, el 7% de las extorsiones son realizadas por personas en libertad.
También asevera que de 2001 a 2015 los extorsionadores han obtenido más de mil 350 millones de pesos a nivel nacional.
“Se emplean más de 2 millones 715 mil celulares, el 52% son originarios del D.F. y se ha detectado que el 7% son de los Estados Unidos, es decir, hay personas en libertad operando desde el país vecino. Incluso hay reos en la Ciudad de México que operan con celulares correspondientes a Michoacán, Puebla, Sonora, Tabasco y Durango”.
De 916 bandas que operaban en los penales, hoy se sabe que siguen ‘en servicio’ 853. El 90% lo hace desde cárceles capitalinas.
Por ello es que la Coordinación Nacional Antisecuestro anunció que “Si fuiste víctima, testigo o viviste un intento de secuestro virtual, denuncia al número sin costo 088 de Policía Federal o al 089 (denuncia anónima); ahí te atenderán las 24 horas del día”.