Una vez más, el responsable de la política interna del país tuvo que corregir la plana al grupo de priístas que ha tomado malas decisiones.

El secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, llegó a Oaxaca a intentar bajar el fuego que incendió, con su empecinada arrogancia, el secretario de Educación Pública, Aurelio Nuño Mayer, quién ya se presentaba ante los gobernadores como el presidenciable del PRI para el 2018.

A raíz de lo ocurrido el pasado domingo en Oaxaca, y semanas antes en Chiapas, Michoacán y Guerrero, la candidatura de Nuño ha quedado sepultada entre la sangre, los escombros y la lápida de la reforma educativa.

Por la gravedad de lo acontecido, Osorio Chong expresó durante su visita a Oaxaca su solidaridad y el respaldo a las familias de quienes lamentablemente perdieron la vida, así como a los que resultaron heridos, entre los que se encuentran civiles y policías, tanto federales como estatales.

“Durante las últimas semanas, diversas regiones de Oaxaca se han visto gravemente afectadas por actos vandálicos, saqueo de comercios, así como bloqueos carreteros y de instalaciones estratégicas. Estos hechos han generado una situación particularmente difícil para la población del estado, que ha enfrentado problemas que también ha referido de desabasto, afectaciones al turismo, y otros sectores de su economía, todo ello en detrimento de miles de familias oaxaqueñas”, reconoció.

En ese contexto, Osorio Chong señaló que a solicitud del gobierno del estado, y por exigencia de la mayoría de los oaxaqueños, el Gobierno de la República ha brindado apoyo a las autoridades locales para atender la situación y liberar los principales puntos de acceso al estado y restablecer el orden en las regiones afectadas.

En este sentido, aclaró que se han realizado operativos conforme a los protocolos de uso de fuerza aplicables a la contención de manifestaciones y bloqueos, es decir, como ha sucedido en casos similares, como ejemplos en la Ciudad de México, Guerrero o el propio Oaxaca. Los elementos que participaron en cada uno de ellos, no portaban armas de fuego.

Refirió que, sin duda, se trata de una situación extraordinaria, que será revisada de forma exhaustiva, puntual y transparente, una situación grave al haber personas que han sido víctimas de disparos.

Anunció que las autoridades ministeriales están llevando a cabo las investigaciones correspondientes, con la participación de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, y con la Comisión Estatal de los Derechos Humanos del estado de Oaxaca.

Agregó que la PGR también habrá de intervenir, y desde el día de ayer se encuentra en el  estado con peritos y personal que la propia procuradora Arely Gómez ha destinado para tal efecto.

Subrayó también que la instrucción en los protocolos son claros para este tipo de situaciones. La policía está ahí para apoyar y proteger a la población. Toda información recabada habrá de ser proporcionada de manera puntual y transparente a la sociedad.

Finalmente, a diferencia de Aurelio Nuño, Osorio Chong abrió a nombre del Gobierno de la República los canales institucionales de comunicación para resolver la situación que acontece en el estado de Oaxaca.

Solo por la vía de la legalidad, solo por esta vía, es posible construir acuerdos y ejercer derechos. Que sean los argumentos, y no la violencia, el puente para buscar los caminos de solución. El gobierno del estado de Oaxaca contará con todo el respaldo, con todo el apoyo para solucionar este conflicto de parte del Gobierno de la República”, sostuvo.

Al tiempo, Manlio Fabio Beltrones anunció su renuncia a la dirigencia nacional de Partido Revolucionario Institucional por su fracaso en la reciente elección del 5 de junio, donde el PRI fue vapuleado y castigado por el voto popular.

Esto obligará a Osorio Chong a implementar una operación quirúrgica al interior del partido en el poder. Tampoco será nada nuevo para el titular de Gobernación, pues para eso se pinta solo y ya lo ha hecho.

La pifia electoral de Beltrones y las pésimas decisiones de Nuño, así como en su momento lo hizo Alfredo Castillo y la corrupción de algunos gobernadores priístas, han puesto en mal al gobierno de Enrique Peña Nieto.

En otras palabras, se debilita el grupo de Manlio y las sobras del “Atlacomulco”; mientras, se empodera y legitima cada vez más el grupo “Hidalgo”. Al tiempo.

 

Miguel Ángel Osorio Chong