El día más difícil para Europa llegó. Este 23 de junio, Reino Unido se jugó su permanencia o salida de la Unión Europea (UE), considerado como el bloque integracionista más grande en la historia de la humanidad. Esta decisión surgió del referéndum llamado Brexit, en el que el pueblo británico elegirá de una vez por todas si abandonaba el espacio europeo o se labraba un nuevo futuro independiente. Los defensores de la permanencia (Bremain) sumaron 48.1 por ciento de votos, mientras los que prefirieron el Brexit (salirse de espacio eurocomunitario) triunfaron con un 51.9 por ciento. La decisión de los británicos abre un proceso sin precedentes en la UE.

¿Qué es lo que pudo impulsar al Bremain?

Sin duda, la muerte de la diputada Jo Cox a manos de un desquiciado mental, de 52 años de edad, que simpatizaba con la extrema derecha. El hecho tuvo lugar a una semana de que se realizará el referéndum.

La muerte de Cox llegó en un momento muy importante para convencer al bloque integrista de votar en contra del Brexit, que en realidad es más bien un voto contra la violencia de grupos extremistas. Los mismos disparos que le quitaron la vida sirvieron también para acabar con la esperanza de los aislacionistas de ver a su país fuera de la Unión Europea. Esto, pese a que Gran Bretaña atraviesa por serios problemas con la inmigración y no sólo por la oleada de inmigrantes provenientes de Medio Oriente a países eurocomunitarios, sino de aquellos que buscan adentrarse hacia los países más ricos de la Unión Europea, como Francia, Alemania y la misma Gran Bretaña.

Antes del asesinato de la diputada laborista, los partidarios del Brexit superaban en 46 por ciento contra 39 por ciento de quienes apoyan que Reino Unido permanezca en el bloque regional. La esperanza que definiría esta controversia, radicaba en un 11 por ciento que se mantenía indeciso, y un 4 por ciento, que se preveía que no asistirían a votar.

¿Cómo fue el proceso?

Para las seis de la tarde, las cifras del referéndum ya daban una victoria de 54% al Bremain contra 46% del Brexit, esto hizo que de inmediato la libra esterlina repuntara de las bajas que había tenido apenas dos semanas atrás al ubicarse en 1,1380 dólares contra el 1,1283 que tenía horas antes del proceso.

Una hora después, el Bremain bajó su porcentaje a 52 por ciento contra 48 puntos porcentuales de los seguidores del Brexit, lo que hizo mover las tendencias hacia una situación más impredecible. La acción hizo que los mercados europeos se mantuvieran nerviosos, tras haber amanecido la mayoría a la baja, salvo el mercado de Italia, que fue el único que registró una leve ganancia.

David Cameron anuncia su dimisión

El Primer Ministro británico, David Cameron, visiblemente afectado, anunció que renunciará a su cargo y ya se lo comunicó a la Reina Isabel. Entregará el liderazgo del Partido Conservador en octubre.

Aseguró que no habrá cambios inmediatos y pidió que la voluntad de los británicos sea respetada.

“La voluntad del pueblo británico es una instrucción que debe ser cumplida. Quiero a este país y me siento honrado de haberle servido y haré todo lo que pueda en el futuro para ayudar a este gran país a prosperar. El Reino Unido es un país especial, tenemos tan grandes ventajas, una democracia parlamentaria en la que resolvemos los grandes problemas sobre nuestro futuro a través de un debate pacífico, una gran nación comercial con nuestra ciencia y las artes”.

James Cameron