Francia carga con otra tragedia. Un grupo de personas fue atropellado por un vehículo en Niza durante la celebración del “Día de la Bastilla”, en el Paseo de los Ingleses. Hasta el momento el Ministerio del Interior francés ha reportado a 84 personas muertas y 100 heridos de gravedad.
El conductor responsable es un ciudadano francés, de origen tunecino, de 31 años conocido por cometer delitos menores relacionados con drogas y alcohol; medios franceses lo nombran como Mohamed Lahouaiej Bouhlel. Murió tiroteado por la policía. En el vehículo se encontró su documentación, según ha informado el gobierno francés.
El presidente François Hollande dijo: “El terror, el terror ha vuelto a golpear a Francia”. También apuntó que el “carácter terrorista” del ataque era innegable y calificó como “una monstruosidad” el uso de un camión grande para matar deliberadamente.
Este el tercer ataque en suelo francés en poco más de año y medio. El 13 de noviembre de 2015 se registraron siete ataques terroristas simultáneos dejando al menos 130 muertos, la acción más violenta se realizó en el teatro de Bataclan donde fueron asesinadas 93 personas. En enero de 2015, un ataque contra el semanario satírico Charlie Hebdo terminó con la vida de gran parte de su redacción.
Desde hace meses, Francia está en alerta por ataques terroristas y las autoridades ya habían advertido varias veces sobre las posibilidades de un nuevo ataque. El atentado de Niza sucedió apenas horas después de que el presidente anunciara que el estado de emergencia se levantaría el 26 de julio.
Las autoridades pidieron a la población permanecer en sus casas y cancelaron el resto de las festividades planeadas en Niza.
Durante la tragedia, el presidente François Hollande pronunció su tristeza a través de su cuenta de Twitter : “Francia se encuentra devastada, afligida, pero es fuerte y lo será, lo será más que aquellos fanáticos que hoy desearon lastimarnos”.
Diversos mandatarios del mundo se unieron a las condolencias y enviaron buenos deseos para aquel país. Tal es el caso de México, en el que el Presidente Enrique Peña Nieto expresó: “México reprueba todo acto de violencia como el ocurrido en Niza. Lamentamos la pérdida de vidas y nos solidarizamos con el pueblo francés”.
Así, la secretaria de Relaciones Exteriores, Claudia Ruiz Massieu, expresó su solidaridad y envió sus condolencias, además de que condenó la violencia ocurrida. Presentó diversos números de emergencia para que los compatriotas radicados en aquel país o que están de vacaciones logren comunicarse con la embajada.
En México, diversos monumentos representativos se iluminaron con los colores de la bandera francesa, entre ellos destaca el Ángel de la Independencia y el edificio de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE).
A su vez, el embajador de México en Francia, Juan M. Gómez Robledo, no dudó en expresar su solidaridad y extender su apoyo tanto para el pueblo francés como para los mexicanos en aquel país, y compartió diversos teléfonos para comunicarse con México, en caso de necesitar algún tipo de asistencia. Asimismo aclaró que no hay víctimas de origen mexicano y recalcó que el 16, 7 y 18 de julio fue declarado duelo nacional en Francia.
También el presidente de Estados Unidos, Barack Obama emitió un comunicado en el que expuso su solidaridad y además ofreció a las autoridades francesas la ayuda necesaria para investigar las entrañas de los sucesos. Además deseó una total recuperación a los heridos.