A unas horas de que el gobierno federal entregue el paquete económico del próximo año, resultan estratégicos los cambios realizados en la cúpula de la administración de Enrique Peña Nieto, con la renuncia de Luis Videgaray como secretario de Hacienda y la asunción de José Antonio Meade como nuevo titular de las finanzas públicas, asegura a Siempre!, el analista político, Marco Cancino.

Señala que debido al desgaste político que arrastraba Videgaray a lo largo de cuatro años. donde encabezo parte de las reformas estructurales, aunado al mal manejo que se dio a la visita del candidato republicano a la presidencia de Estados Unidos, Donald Trump a nuestro país —que él operaría y provocara una tormenta de críticas al presidente de la república —, no le habrían permitido negociar el presupuesto 2017.

“Habría sido muy complicado para Luis Videgaray llevar a cabo esas negociaciones, encabezarlas y discutirlas con un congreso opositor, donde realmente lo que se buscaba era su cabeza. Desde el punto de vista político, se complicaría negociar reducciones al gasto público inclusive en temas de subsidios de programas sociales, ya que también se le calificaba de haber traicionado a la patria y esa es la dificultad justamente de negociar ante el Congreso”.

El analista político considera que el nombramiento de José Antonio Meade al frente de Hacienda permite al gobierno contar con hilos conductores con partidos como Acción Nacional —que propone una reducción de 600 mil millones de pesos— para sacar adelante el presupuesto en el Congreso, ya que fungió como titular de la cartera durante la administración calderonista. Además de que es reconocido por la iniciativa privada, por los sectores financieros, como un técnico, como un especialista, además de institucional.

Respecto al nombramiento de Luis Enrique Miranda Nava al frente de Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol), Cancino consideró que es un operador político, con un “colmillo” muy largo, y “su ubicación dentro de Sedesol se debe pensando a lo que viene el próximo año, que son las elecciones en el Estado de México y la presidencial, y de cómo se puede hacer un uso mucho más eficiente del gasto social desde el punto de vista político”.

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