La noche del 13 de septiembre María Villar Galaz de 39 años, de tez blanca y pelo largo, fue secuestrada después de tomar un taxi en Patio Santa Fe, al poniente de la Ciudad de México. Su captor la llevó al menos a dos cajeros automáticos para sacar dinero.

Villar Galaz tenía nacionalidad española y era sobrina de Ángel María Villar, presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF). Durante siete días, Cristiano Do Vale, esposo de María y su primo Gorka Villar la buscaron en las procuradurías local y federal. Asimismo, recorrieron varias dependencias de gobierno en busca de información y pidieron ayuda a la embajada española.

Cuando la víctima no llegó a su casa ubicada en la colonia Polanco, amigos cercanos la comenzaron a buscar a través de Facebook: “Una amiga está desaparecida desde ayer a las 9pm… Su nombre es María Villar Galaz, es de España y vive en México DF”.

Este martes, familiares de la española recibieron la noticia que su cuerpo fue hallado la tarde del 15 de septiembre en un riachuelo de Santiago Tianguistenco, un poblado a poco más de una hora de la Ciudad de México. Fuentes de la Procuraduría del Estado de México indicaron que no encontraron identificaciones con la víctima, por lo que lo transportaron a la morgue de Toluca.

Una persona cercana a la investigación asegura que la mujer de 39 años murió asfixiada con una bolsa en la cabeza y se encontraba atada de manos. Autoridades no han revelado cuántas personas estuvieron implicadas en el crimen.

La Procuraduría General de la República (PGR) confirmó que el esposo y el primo de María Villar Galaz hicieron un pago a los secuestradores el 14 de septiembre. Aunque no se reveló la cantidad que se pedía por la mujer, versiones aseguran que rondaban los dos millones de pesos. El ministro de Exteriores, José Manuel García-Margallo, aseveró que el monto pagado fue muy inferior al solicitante.

Desde el 15 de septiembre, la Subprocuraduría Especializada en Investigaciones de Delincuencia Organizada (SEIDO) inició una investigación a petición de la familia. En un comunicado, la PGR indicó: “Las autoridades de procuración de justicia federal y locales trabajan para el esclarecimiento de los hechos y la captura de quienes resulten responsables”.