A unas horas de que la Comisión de Justicia Partidaria del PRI sesione para analizar el futuro del gobernador de Veracruz, Javier Duarte, quedan al descubierto las fricciones dentro de las filas del tricolor. Dos noticias salen a la luz. Por un lado el desplegado de diputados vinculados a Duarte para defenderlo y, por otro, la liquidación de más de 1.2 mdp de Enrique Ochoa tras renunciar a la CFE.

Luego de esas filtraciones, el presidente del PRI, Enrique Ochoa Reza, aseguró que la Comisión de Justicia Partidaria “no cederá a presión alguna ni se dejará intimidar” en el proceso de suspensión de derechos de Duarte.

En torno al desplegado a favor del veracruzano, respondió: “Ciertamente, cuando se afectan intereses uno espera que existan reacciones, pero la Comisión Nacional de Justicia Partidaria y el PRI continuarán revisando los casos y no cederemos a presión alguna”.

Dijo que dicha Comisión revisará el caso, ya que tanto el gobernador como funcionarios de su administración “ha habido distintas investigaciones de instituciones del Estado mexicano, múltiples señalamientos en la prensa nacional y en consecuencia la Comisión Nacional de Justicia Partidaria sesionará para analizar el caso”.

Asimismo, indicó que también se continuará con la revisión de otros casos de probable corrupción de gobernadores como el de Quintana Roo, Roberto Borge Angulo y de igual manera buscará que se indague “con toda firmeza los actos de corrupción que ha cometido el ex gobernador panista de Sonora, Guillermo Padrés”.

Liquidación de CFE

Diferentes medios de comunicación dieron a conocer que Ochoa Reza recibió una liquidación equivalente a nueve meses de su salario de la CFE –más de 1.2 millones de pesos–, pese a que fue director de esta empresa durante sólo dos años y cinco meses, y que no fue despedido, sino que renunció.

A lo anterior, Ochoa Reza argumentó que su liquidación se efectuó apegada a la ley y a los manuales internos de la empresa, los cuales están vigentes desde hace 15 años, de manera que no recibió un trato “preferencial” respecto a otros directores.

Aseveró que la filtración de documentos y los señalamientos sobre la liquidación que obtuvo tras renunciar a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) son un intento de frenar la lucha de su partido contra la corrupción, señaló que es una “historia falsa” que haya recibido un trato preferencial o irregular de la CFE, para que le otorgaran una liquidación por un monto de 1.2 millones de pesos, tras renunciar.

“A los que tratan de detenernos les digo, que en lugar de filtrar documentos para contar una historia falsa, los reto a que den la cara y a que debatamos sobre cómo vamos a resolver los problemas de corrupción y de impunidad”, agregó en un mensaje en video.