SEXTO AÑO. NÚMERO 144

Nobel a Dylan y muerte de Roberto Escudero

Menuda polémica la que se ha armado en torno al Premio Nobel a Bob Dylan, sobre todo entre los que ignoran, o pretenden ignorar, que el más remoto origen de la literatura es el canto. En Grecia, cundo se recitaba se acompañaba de música de flauta y cuando se cantaba la lira era el instrumento que la acompañaba, de ahí proviene el nombre de poesía lírica. De Bob Dylan se escribe en la nota que inicia este número y puede leerla en este enlace.

            Dos colaboraciones se refieren a la reforma educativa, la primera, de Magdalena Galindo –que puede leer aquí– pone sobre el tapete de la discusión la que llama la reforma silenciosa, la que ha ido cambiando, desde hace tiempo, los planes de estudio para crear trabajadores, no para las necesidades y problemas del país, sino hechos a la medida de la globalización. La segunda postula que esta reforma educativa es una contraofensiva a la universidad surgida por los movimientos estudiantiles del 68 y que su fin último es la privatización, léala aquí.

            Boris Berenzon Gorn, en una texto inquietante y al cual puede tener acceso en este enlace, hace un urgente llamado al cambio, porque estamos sumidos en la cultura de la violencia. Pasa la lista, en rápido recuento, a la violencia contra las mujeres, los niños, los migrantes, la diversidad sexual, los adultos mayores.

            La nota que cierra La cultura hoy, mañana y siempre, suplemento en línea de la revista Siempre!, se dedica a Roberto Escudero, líder del Movimiento Estudiantil Popular de 1968. Escudero, aunque padecía diabetes, murió en un accidente casero, el pasado 8 de septiembre. Un breve paréntesis, más bien para mostrar distancia, se refiere al fallecimiento de Luis González de Alba ocurrido por voluntad propia el 2 de octubre. Ambos dirigentes eran representantes de la Facultad de Filosofía y Letras al Consejo Nacional de Huelga. Puede revisar el texto en este enlace.