Por Carlos Alberto Pérez Cuevas

 

El primer signo de la corrupción en una sociedad que todavía está viva es que el fin justifica los medios.

Georges Bernanos

En muchas naciones, como en el caso de México, se han diseñado leyes, procedimientos y sistemas que pretenden combatir y erradicar el grave problema de la corrupción. Algunas acciones han sido muy eficaces y dado muy buenos resultados, otras han sido frenadas de golpe por graves resistencias políticas o económicas, algunas más se han quedado en el olvido.

Existen problemas muy complejos y la necesidad de contar con  definiciones y conceptos específicos que homologuen acciones que permitan resultados óptimos.

CorrupciónUn catálogo de conceptos que ayuda sobre los principales actos de corrupción que sufren de manera similar casi todos nuestros países es el que ha generado la convención de las naciones unidas contra la corrupción. Han logrado unificar los criterios en “seis capítulos: la prevención, la penalización, la cooperación internacional, la recuperación de activos y la asistencia técnica.”*

Esta iniciativa  reúne a mas de 180 gobiernos del orbe durante una semana cada dos años. Tuve la oportunidad de participar como parte de la delegación de la Organización Mundial de Parlamentarios Contra la Corrupción, en la reunión más reciente, a finales de 2015 en la ciudad de San Petersburgo, Rusia, y ser testigo de las grandes tareas y acciones que se implementan en la lucha mundial anticorrupción.

 

Los daños que genera la corrupción

Según los cálculos hechos por el Fondo Monetario Internacional en un estudio de 2015, se tiene que la corrupción genera un daño económico mundial de  entre 1.5 y 2 billones de dólares cada año. Lo que sería equivalente a dos veces el producto interno bruto de España; o bien que con esa cantidad se podría comprar alrededor del 3 por ciento del total de los bienes y servicios producidos en todo el orbe, cifras extremadamente exorbitantes. El dinero que se desvía, al no llegar al destino para el que fue programado, se convierte en faltas de oportunidad de desarrollo, en becas que no podrán otorgarse y carreras o proyectos de vida que se truncarán, falta de medicinas que habrían podido salvar vidas o curar enfermedades. Hospitales con servicios deficientes que se convierten en salas de sufrimiento y muerte, obras mal hechas que pondrán en peligro a ciudades y personas, policías mal pagados o vendidos con la delincuencia y, por supuesto, enormes deudas que terminarán pagando los ciudadanos; la lista de daños y las consecuencias directas que genera la corrupción sería interminable y prácticamente es imposible cuantificar tanto el dinero como los daños.

En México existe un gran reto; ahora que se ha nombrado a la titular de la Función Publica tendremos que ver acciones concretas de combate a la corrupción.

*Principales líneas de acción de la Convención Anticorrupción de las Naciones Unidas.

@perezcuevasmx

perezcuevasmx@gmail.com

 Perez