Birmingham, Reino Unido.- Este 24 de noviembre se cumplen 25 años desde la muerte de Freddie Mercury, líder del grupo Queen e icono del rock británico cuyas canciones como We are the champions, We will rock you, Bohemian rhapsody (sólo para mencionar algunas) siguen fascinando a muchos, pues es suficiente ver el número de visualizaciones de cualquier de los videos de la banda en Youtube para darse cuenta de su popularidad todavía en estos días.
Farrokh Bulsara, así fue su verdadero nombre, nació en 1946 en la isla de Zanzíbar, en Tanzanía. El nombre Freddie se podría considerar como una versión inglesa de Farrokh, que usaba ya en tiempos de colegio; su apellido Mercury fue agregado después con la referencia al dios romano Mercurio. En 1970 se formó Queen, la banda con la cual Freddie logró colocarse en la escena del rock a finales de los años setenta y dominar durante la década de los ochentas. El éxito, abstrayendo del innegable talento de Mercury, se debe mucho a su carisma, su performance en el escenario y a sus muchas controversias en cuanto a su sexualidad. En aquella época el mundo no era todavía tan abierto frente al tema de la homosexualidad, el cual Freddie manifestó abiertamente en uno de sus éxitos: I want to break free, no sólo con la letra de la canción misma “Quiero liberarme”, sino por el videoclip en el cual el cantante aparece vestido de mujer y con su famoso bigote; una explícita alusión al cantante de Village People, Glenn Hughes, por cierto, icono gay.
¿Quién quiere vivir para siempre?
Paradójicamente el título de una de las canciones de Queen (“Who wants to live forever ¿Quién quiere vivir para siempre?) anticipa en algún sentido el fin de su breve vida, no obstante que fue creada para un propósito particular como la película Highlander: el inmortal, pues el líder de Queen fue conocido por su vida nocturna y hedonista en los gay clubs de Nueva York y Munich, al ritmo de la canción I want it all (“Lo quiero todo, lo quiero ahora”).
Las primeras especulaciones sobre su salud surgieron en los tabloides a finales de los años 80, sobre todo después de la muerte de sus antiguos amantes a causa del SIDA. Freddie mantuvo su enfermedad en privado, sólo los más cercanos sabían de su condición. Decidió continuar con su trabajo fingiendo que le iba bien: “Soy un gran farsante…fingiendo que me va bien” (The Great Pretender); por tanto tuvo también el apoyo del resto de su banda, quienes guardaron su secreto y, en cierto sentido, lo protegieron. El 23 de noviembre de 1991, un día a priori a su muerte, Freddie anunció de manera oficial estar contagiado de SIDA. Freddie Mercury murió en su casa en el barrio de Kensington en Londres. Freddie Mercury (1946–1991) R.I.P.