En el estado de New Hampshire existe un poblado. Esta pequeña localidad denominada Dixville Noch es famosa por una sola cosa: su población es la primera en registrar su voto los supermartes de elección. Pero no sólo por eso, sino porque es el primer rasero que permite evaluar el curso de las elecciones en toda la Unión Americana. Hace unos minutos, ocho de los únicos doce habitantes que viven ahí fueron a las urnas para emitir su voto. El resultado: cuatro sufragios para la demócrata Hillary Clinton; dos para el republicano Donald Trump, uno para Gary Johnson, aspirante del Partido Libertario y otro para Mitt Romeny quien, aunque no figura en la papeleta, hubo quien lo prefirió por encima de los demás.

Dixville Notch está ubicado en la costa este de Estados Unidos. Exactamente a las cero horas, sus habitantes acuden a las urnas para votar seis horas antes que el resto de la nación. La gente se reúne en el hotel Balsams Resort, que recibe a estos votantes trasnochados y se después se unen a una pequeña fiesta, en una tradición popular que data de 1960. Ese año, Richard Nixon obtuvo una arrasadora victoria de nueve votos, que en aquella ocasión era el total del porcentaje del padrón de esa pequeña localidad costera. Pero, ojo con esto, el resultado no significó que Nixon venciera en los comicios, pues no pudo derrotar a su contrincante demócrata John F. Kennedy, quien se impuso con un ligera ventaja.

Ciertamente Hillary inició con ventaja en esta elección, pero habrá que esperar por el resultado nacional, el cual se dará entre las nueve y diez de la noche de hoy. Por lo pronto, nueve estados abrieron las urnas en punto de las 6 de la mañana: Connecticut, Indiana, Kentucky, Maine, New Hampshire, New Jersey, el estado de New York, Vermont y Virginia.

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