2017 llegará un segundo más tarde
René Anaya
Este año, que pronto terminará, ha parecido un año larguísimo por las devaluaciones del peso (“deslizamientos”), la elevación de las tasas de interés, la elección de Donald Trump, el ahondamiento de las crisis económica, política y social de nuestro país y los fallecimientos de grandes personajes de la cultura, pero realmente será más largo.
Por disposiciones del Servicio Internacional de Rotación de la Tierra y Sistemas de Referencia (IERS, por sus siglas en inglés), este año no tendrá 31 millones 622 mil cuatrocientos segundos, como todo año bisiesto, sino que se le agregará un segundo.
Una medición más precisa
En este largo año, algunas de las pérdidas lamentables fueron las de Harold Kroto, ganador del Nobel de Química por el descubrimiento de los fulerenos; Luis Estrada, considerado padre de la divulgación científica en el México del siglo XX; Luis González de Alba, que tuvo una rica faceta como divulgador; John Glenn, primer astronauta estadounidense; los escritores Umberto Eco, Darío Fo, Ignacio Padilla, René Avilés Fabila, entrañable compañero, Guillermo Samperio y David Ojeda. Así como Fidel Castro, Shimon Peres, Leonard Cohen, David Bowie, Gato Barbieri y Betsy Pecanins, entre otras celebridades.
Sin ánimo de desalentar los buenos propósitos de la temporada, probablemente 2017 sea peor que este año, por lo que se vislumbra en el panorama mundial. Por lo tanto, sería conveniente que disfrutáramos de ese segundo de más del 2016, que servirá para sincronizar el Tiempo Universal Coordinado (UTC, por sus siglas en inglés) con el tiempo solar medio que se calcula con base en la rotación de la Tierra; como se estableció desde 1970.
Diez años antes, con la creación del Sistema Internacional de Unidades, se definió al segundo como la 86 mil cuatrocientosava parte de la duración de un día solar medio entre los años de 1750 a 1890. Siete años más tarde, en 1967, se revisó la definición y se modificó, desde entonces los segundos se definen como “la duración de 9 192 631 770 periodos de la radiación correspondiente a la transición entre los dos niveles hiperfinos del estado fundamental del átomo de cesio 133”, según refiere el Centro Nacional de Metrología en su publicación El Sistema Internacional de Unidades (SI).
La medición más precisa no se basa en un solo reloj atómico, se utilizan 400 relojes atómicos colocados en 70 laboratorios en todo el mundo para obtener el UTC. De esta manera se detectó que la Tierra gira cada vez más despacio, por lo que en 1970 se estableció que cuando la diferencia entre el UTC y la hora astronómica fuese de más de 0.8 segundos, se introdujera un segundo intercalar la noche del 30 de junio o la del 31 de diciembre.
Los segundos intercalares
A partir de 1972 se han añadido 27 segundos intercalares (contando ya el que se agregará el 31 de diciembre próximo), de los cuales 16 han sido el 31 de diciembre y 11 el 30 de junio. Los ocurridos en este siglo fueron en 2015 y 2012 el 30 de junio y 2008 y 2005 el 31 de diciembre.
Aunque solamente se añade un segundo, ese cambio causó en 2012 graves problemas en la internet: el sistema de la línea aérea australiana Qantas se colapsó durante varias horas; asimismo se interrumpieron los servicios de Google, Mozilla, Reddit, Linkedin, Yelp y FourSquare.
Estas fallas han servido como pretexto para que Alemania, Estados Unidos, Italia, Francia, Japón y Rusia se opongan a continuar añadiendo el segundo intercalar, ya que afirman que su inclusión altera los sistemas de precisión de la navegación, las telecomunicaciones y el sistema financiero. Sin embargo, las repercusiones han sido mínimas.
En contraparte, la Gran Bretaña se ha convertido en el principal defensor de los segundos intercalares, ya que mientras el UTC mantenga una diferencia menor de un segundo con el Tiempo Universal, es decir el meridiano de Greenwich, los británicos seguirán orgullosos de regir el tiempo del planeta.
Por lo pronto, en nuestro país el segundo intercalar en el tiempo del centro se incluirá antes de las 18 horas, por lo que de las 17 horas, 59 minutos y 59 segundos se pasará a las 17 horas, 59 minutos, 60 segundos y después a las 18 horas, 0 minutos 0 segundos. En el tiempo del sureste el segundo intercalar se colocará antes de las 19 horas; en el Pacífico estará antes de las 17 horas y, por último, en el del noroeste el segundo intercalar será el de las 15 horas 59 minutos 60 segundos. Así que el nuevo año 2017 llegará un segundo después.
reneanaya2000@gmail.com
f/René Anaya Periodista Científico