Paulina Figueroa

Pese a que el presidente Enrique Peña Nieto prometió que ya no habría más gasolinazos gracias a las reformas energética y hacendaria, el hecho se convirtió en un tema cotidiano para los mexicanos desde que comenzaron los incrementos graduales en 2015.

A unos días de que terminara el 2016, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público anunció un aumento a partir del primer minuto de este año para las gasolinas Magna, Premium y el Diésel de 14.2%, 20.1% y 16.5%, respectivamente, sobre el precio máximo observado en diciembre pasado.

Durante los últimos minutos del 2016, las gasolinerías comenzaron a saturarse de automovilistas que pretendían llenar los tanques de gas, con la finalidad de evitar el nuevo aumento.

Sin embargo, a comienzo de este año se iniciaron las protestas por el nuevo incremento, las gasolinerías y las calles fueron tomadas por ciudadanos descontentos con la nueva implementación.

Bajo el contexto del gasolinazo se han desatado actos vandálicos, como denominó el gobierno federal, principalmente en la Zona Metropolitana del Valle de México. Nicolás Romero, uno de los municipios mexiquenses más afectados, fue irrumpido por un grupo de 50 encapuchados que saquearon una tienda Chedraui, de la cual sustrajeron pantallas de televisión y artículos electrónicos.

José Manzur Quiroga, secretario general del Estado de México, explicó que la administración estatal respeta la libertad de expresión ante las protestas; sin embargo, pidió que lo anterior se realice con apego a la legalidad.

Por su parte, el subsecretario de Gobierno de Gobernación, René Juárez Cisneros, señaló que se trató de actos al margen de la ley, que nada tienen que ver con una manifestación pacífica, ni con el derecho a la libre expresión que tienen todos los mexicanos.

En tanto, la Confederación Patronal de la República Mexicana indicó que el alza de los precios de los combustibles es “desproporcionada” y “preocupante”, ya que atenta la economía y el bolsillo de los consumidores.

Enero, inflación alta

Ante la incertidumbre sobre qué sucederá en el plano económico ante el llamado gasolinazo, Siempre! platicó con Juan Pablo Castañón, presidente del Consejo Coordinador Empresarial, quien explicó las medidas que impulsará el sector para hacer frente a esta crisis.

El presidente Enrique Peña Nieto aseguró que el aumento del precio de las gasolinas es una medida responsable y tiene como fin mantener la estabilidad económica. ¿Coincide con esta postura?

Coincidimos, ya que el precio del petróleo cambió durante el 2016 de 33 dólares el barril a 44 dólares y la depreciación del peso fue prácticamente del 20%. Era necesario un ajuste, que si bien es doloroso y tiene repercusiones en la inflación, era urgente para evitar los subsidios en la economía y nadie quiere que tengamos subsidios para fijar el precio de la gasolina. De momento nos dejaría a todos más tranquilos, pero en el mediano plazo los subsidios significan deuda y las deudas significan más inflación y una regresión en la calificación de México en las barreras internacionales.

Por lo tanto, apreciamos que en la Secretaría de Hacienda haya disminuido el valor del impuesto (IEPS) de 4.60 a 3.20 pesos. Para nada hubiéramos querido un asunto subsidiario porque eso nos genera repercusiones negativas en nuestra economía.

Sabemos que es muy doloroso y ha generado muchas reacciones negativas en la sociedad, pero también sabemos que va en el sentido correcto de un México de apertura que nos permita que en lo sucesivo, si suben los precios del petróleo, tenemos que pagar más por la gasolina que consumimos.

La gasolina de México tendrá mayor calidad en el servicio y con la inversión que haga la iniciativa privada se tendrá la oportunidad de bajar el precio de las gasolinas.

¿Qué repercusiones económicas tendrá esta nueva política tarifaria para los combustibles?

Nosotros calculamos que durante enero tendremos entre 4.5 y 4.8% de inflación, que haciendo un esfuerzo por un programa de incentivos fiscales, de generación de empleos, de sostenimientos a los empleos y una buena conversación de actualización de libre comercio con los Estados Unidos, podemos nivelar la inflación en el transcurso del año.

Mientras tanto, hay que hacer un esfuerzo apoyando pequeñas empresas, creando incentivos fiscales para generar esquemas de repatriación de capitales, incentivos a la industria de vivienda y un gran cuidado en el gasto público para que no se sobrepase lo presupuestado.

Andrés Manuel López Obrador prometió que de ganar la Presidencia en 2018 reducirá el precio de los combustibles y la luz. ¿Es viable este plan o es oportunismo del líder de Morena?

Los actores políticos han aprovechado esa circunstancia para hacer su posicionamiento y están impulsando el descontento social, vemos saqueos en tiendas departamentales, gasolinerías. Ese tipo de posturas se equivocan sobre lo que México requiere, bajar los precios de las gasolinas y la electricidad sería a través de subsidios que generarían más deuda y más inflación. Nosotros, como empresarios, no estaríamos de acuerdo.

De los 25 puntos para hacer frente al gasolinazo, ¿cuáles son prioritarios? ¿Ha tenido algún contacto con el Congreso o con la Secretaría de Hacienda?

Estamos teniendo mesas de trabajo con Hacienda en ese sentido y para nosotros tiene dos dimensiones. Por un lado, es el cuidado del gasto público y de la deuda. Es importante abonarle a la deuda lo más posible y tener un superávit primario que no llegue a endeudarnos más para poder cubrir los interés de la deuda y por eso hemos tenido el gasto muy vigilado, hacer los ahorros posibles.

Además incentivar nuestra economía interna: si vamos a tener conversaciones con respecto al Tratado de Libre Comercio y con la nueva administración norteamericana, buscaremos tener las condiciones para que retornen algunas inversiones, pero tenemos que convencer esto con inversiones mexicanas.


Luis Videgaray

Bienvenida a Videgaray

¿El gobierno federal mintió que con las reformas hacendaria y energética habría gasolinas más baratas gracias a la competencia?

La reforma energética nos dio la apertura y nos dio mayores actores en los mercados. Durante 2017 y 2018 tendremos gasolina de distintas marcas y no solamente la de Pemex, y en la mayor oferta tendremos diferentes calidades y precios. La reforma energética no tiene nada que ver con lo que está sucediendo.

México ha sido uno de los países que más ha crecido en el consumo de gasolina y hoy significa que tengamos que cortar el 60% de las gasolinas que consumimos y hay que ajustar para que tengamos niveles de precios adecuados a las nuevas realidades implementadas por el gobierno federal hace un año.

La reforma energética no tiene nada que ver con una política errada en materia política o fiscal,  sólo es un ajuste a las nuevas circunstancias, el esfuerzo que ha hecho el gobierno es bajar de 4.60 a 3 el impuesto.

¿Es adecuado el regreso de Luis Videgaray al gabinete de Peña Nieto en el contexto de que Donald Trump le está quitando empleos a México?

Videgaray es un hombre muy capaz, muy profesional, que nos advirtió acerca de la posibilidad de que Donald Trump llegara a la Presidencia de los Estados Unidos, y es quien ha sido contacto del gobierno mexicano con el equipo de campaña. Vamos a iniciar una conversación no sólo comercial sino migratorio. Un reconocimiento a la canciller que está terminando su gestión y le damos la bienvenida a un hombre que cumple en las conversaciones con los Estados Unidos.