No sólo es la inteligencia estadounidense la que investiga los múltiples casos de vínculos entre el presidente electo Donald Trump y el gobierno ruso, también lo hacen otros servicios estratégicos en el mundo, esto, de acuerdo con informes revelados por dos funcionarios del Mossad israelí, de quienes no se mencionaron sus nombres. “Pueden confiar en mí cuando les digo que son muchas las agencias de inteligencia que están tratando de evaluar hasta qué punto Trump podría tener vínculos, o alguna debilidad de algún tipo, con Rusia“, dijo uno de ellos. “Parte del interés de Israel proviene de querer saber cuánto de la inteligencia que comúnmente comparte con Estados Unidos podría alimentar a Rusia”.

¿Obsesiones y perversidades de Trump?

Se tienen reportes que acerca de un dossier no verificado que afirman que el gobierno ruso tenía material que pudiera ser usado para chantajear a Trump. Ese dossier señala que Rusia tenía grabaciones de las obsesiones personales y de las perversiones sexuales del magnate. Luego se reveló que el documento había sido recopilado por Christopher Steele, un ex miembro de la agencia británica de inteligencia MI6.

Le preocupa también a GB

Se dice que Steele, quien fue contratado para espiar a Trump por sus enemigos políticos durante su campaña electoral, llegó a preocuparse tanto por las acusaciones que descubrió que envió su informe al FBI. El diario británico The Independent dijo que Steele llegó a creer que había un encubrimiento, un tipo de cábala dentro de la Oficina que bloqueó una investigación exhaustiva sobre Trump.

Reunión con Putin al estilo Reagan

La noticia aparece a casi una semana de que Trump afirmara en su primera conferencia de prensa con un lenguaje empresarial que “Rusia es un activo” y que su ayuda era crucial para desarticular al Estado Islámico. Asimismo, un día después de que anunciara que se reunirá con el presidente Vladimir Putin en Islandia para “renovar” las relaciones con el Kremlin, en una acción que busca recordar el encuentro en Reikiavik entre Ronald Reagan y el líder soviético Mijaíl Gorbachov en 1986 en la última fase de la Guerra Fría. Entre otras cosas, Trump busca negociar un acuerdo de limitación de armas nucleares.

Un arma de dos filos

Los funcionarios israelíes coincidieron en que las agencias de inteligencia también han reportado que existen varios documentos que establecen un vínculo entre Trump y Rusia. “Hay varios reportes sobre los vínculos entre Trump con Rusia. El dossier es sólo uno de ellos, pero hay muchos otros que dejan en claro esa situación. Algunos son más específicos que otros. Pero pueden estar seguros en que muchas agencias de inteligencia internacionales están evaluando hasta qué punto Trump puede está ligado o, tal vez debilitado por presionado de algunas manera por Rusia”, concluyeron.

Sólo para que lo sepan, Rusia ha sido un país que si bien no ha sido un gran aliado de Israel, sí ha estado cercano a su visión geoestratégica. Se dice que la mayoría de los judíos que emigraron a Israel provienen de ese país después de la Segunda Guerra Mundial, huyendo del Holocausto o incluso del régimen estalinista. Se calcula que la comunidad rusófona israelí es la tercera mayor en el mundo, después de Estados Unidos y Alemania. Sin embargo, hay quienes creen que en términos porcentuales es la primera con poco más de ocho millones de ciudadanos israelíes, más de 1,2 millones llegaron de la desaparecida Unión Soviética.