Debido a la incertidumbre que genera la relación entre México y Estados Unidos, nuestro país vive un momento de desafío económico pero no tenemos una crisis económica, aseguró el presidente Enrique Peña Nieto, durante una gira de trabajo por Huejutla, Hidalgo.
Pidió a los mexicanos no dejarse guiar por “aquellas voces que a fuerza nos quieren condenar a que estamos exclusivamente mal. Tenemos rezagos, tenemos retos, pero también tenemos importantes avances”. El primer mandatario expuso que hay varios indicadores que dejan ver que el consumo interno en nuestro país está creciendo y que son muestra de la vitalidad de nuestra economía.
Explicó que de acuerdo con cifras del IMSS, enero es el primer mes del año de toda su administración en el que más empleos se han generado— 83 mil— con lo que se alcanzan ya 2 millones 400 mil trabajos creados en todo el sexenio.
Destacó que pese a los recortes en el Presupuesto de Egresos 2017 para enfrentar la caída en los precios internacionales del petróleo, su gobierno no va a limitar ni restar recursos de los programas sociales.
Manifestó que con Estados Unidos se ha tenido una relación histórica, es nuestro vecino geográfico y los gobiernos no pueden alterar y cambiar esa condición y ratificó que “se entregará en cuerpo y alma a defender los intereses de México. Nada por encima de ellos”, puntualizó.
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Riesgo de recesión
Sin embargo, un análisis Bank Of América BofA Merrill Lynch advierte que si el nuevo mandatario estadounidense interrumpe el envío de remesas, México enfrentará el riesgo de recesión.
Luego de que al cierre de 2016 se reportaran niveles históricos en el envío de remesas, para este año se espera una caída del 5% en el flujo anual, que sería la mayor baja en 8 años— alrededor de mil 349 millones de dólares—.
De acuerdo a un informe de Carlos Capistrán, economista en jefe de BofA para México, las medidas antimigrantes —más allá del muro fronterizo— como es la confiscación o el gravamen a las remesas, harán que sus efectos sean sentidos en el mediano plazo.
Capistrán dijo que la economía mexicana apenas crecerá un 1.25% durante este año. Explicó que la economía está atrapada entre la elección presidencial estadounidense y la que se realizará en México en 2018, por lo que hay incertidumbre y se espera una menor inversión durante este año.
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Peligro, plan fiscal de Trump
Para algunos especialistas, más allá de la renegociación del TLCAN por un acuerdo bilateral con México, el peligro es el plan fiscal de la administración estadounidense que podría aplicar medidas que impactarían los niveles de inversión en nuestro país, como es la implementación de un Border Adjustment Tax BAT para favorecer la producción en territorio estadounidense, una menor tasa de ISR corporativo que haría que muchas empresas mejor inviertan en la Unión American.
También se plantea un estímulo único para la repatriación de capitales con una tasa de un 10% lo que afectaría la costa de los flujos que van a otros países, particularmente a nuestro país.