Breve crónica 2017

Zoé Robledo A.

El manglar es una planta que crece en agua dulce, en zonas cercanas al mar, es una especie de raíces fuertes y ramas extensas que en un ciclo continuo ayuda a mantener el equilibrio de un ecosistema maravilloso y delicado.

Hace tres años, junto con jóvenes universitarios, pequeños comerciantes y habitantes de la playa de Puerto Arista en Chiapas, iniciamos lo que entonces se llamó “Yo limpio la playa 2015”.

Durante cuatro días, en Semana Santa, casi un centenar de brigadistas nos dedicamos a recoger basura, latas, botellas de plástico, colillas, unicel y un sin fin de materiales que los visitantes suelen dejar sobre la arena y cuyo destino habría sido el mar y el estómago de tortugas, peces o delfines.

Este fue un esfuerzo nunca antes emprendido en la historia de Puerto Arista. En 2016 lo repetimos y crecimos, los voluntarios llegaron a ser un grupo de ciento sesenta personas, sumando voluntad, energía y compromiso con una “playa limpia”.

Esta semana (2017), nuestro compromiso tomó aún más fuerza: el programa “Chiapas Limpio, Chiapas Libre” es hoy una realidad que llega no solamente a Puerto Arista. Este año estuvimos en Playa Linda, Chocohuital, Playa del Sol y el MadreSal.

La experiencia fue extraordinaria y corrobora algo que he podido palpar desde 2015: nadie en estos tres años me ha dicho que prefiere tirar su basura en la playa, en vez de guardarla en bolsas y luego ponerla en contenedores, la gente libre siempre prefiere ser buena, limpia y honesta.

En estos cuatro días de campaña tuve el privilegio de conocer las historias de esa gente, de esas mujeres y hombres, buenos y honestos que caminan sobre la arena todos sus días.

Conocí a Octavio, Francisco, Ramón, Mario, Juanita y otras 31 personas que integran la cooperativa del centro ecoturístico del “MadreSal”.

Este lugar es un sitio en el que todas y todos trabajan para el beneficio común desde hace casi diez años; al principio les llamaban locos, pero hoy hay otros locos imitando su esfuerzo.

Lo mismo sucedió en Playa Linda, en donde la familia Torres García, de Tapachula, fue a pasar el Viernes Santo.

Don Jorge Torres es un pequeño comerciante en un mercado de Tapachula, vende aguas frescas, horchata y tamarindo, y cuando está a buen precio también agua de coco. Con su esposa doña Mary, tienen 3 hijos: Lucila, Laurita y Carlos.

Cuando nos acercamos a contarles del proyecto “Chiapas Limpio, Chiapas Libre”, su respuesta fue primero de asombro y luego de simpatía. Esta familia viene desde hace muchos años a Playa Linda y nunca les habían regalado bolsas para depositar su basura.

“Lo veo muy bien, que estén haciendo esto” nos dijo doña Mary, mientras se agarraba el sombrero para que el viento no se lo llevara, también nos contó que en su casa ella junta botellas de plástico y latas para venderlas por kilo y complementar el gasto familiar. Nos contó que cuando viene a Playa Linda ve muchas botellas y latas tiradas y que ahora con “Chiapas Limpio, Chiapas Libre” mantener limpio Playa Linda será más sencillo.

Playa del Sol es un sitio que visitamos por primera vez este año. Esta es una playa que se ubica junto a Puerto Arista, pero habitada por un grupo de personas con un compromiso ambiental que augura un gran futuro: Playa del Sol es una playa razonablemente libre de basura porque quienes ahí trabajan se encargan de levantar la basura y están procurando crecer de manera ordenada.

Ahí en Playa del Sol viven y trabajan la maestra Deysi y mi amigo Salvador; ellos llegaron ahí hace tres años para pasar esta etapa de su vida acompañándose del mar, un mar y una playa con los que están profundamente comprometidos. Platicar con ellos permite palpar su cariño por este sitio y su convicción de que hay que mantenerlo limpio para que siga llenándonos de vida.

La tarde que pasé a saludarlos, el mar estaba bravo y el cielo nublado. “El mar anda de malas”, me dijo Salvador, “No le gusta que quienes lo visitan contaminen con basura y música estridente, por eso protesta”.

“Chiapas Limpio, Chiapas Libre” fue posibles gracias a la participación de Judith, Andrea, Manuel, Adriana, Raúl, Magaly y muchos otros más que ya van por su tercer año sumados a este proyecto que, como un manglar, crece, se renueva y se fortalece para favorecer el equilibrio entre personas y ecosistema.

“Chiapas Limpio, Chiapas Libre” es la muestra de que es posible construir un futuro diferente, un futuro libre de basura y de corrupción.

¡Empecemos ya!

@zoerobledo

Senador por Chiapas

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