El subsecretario de Gobernación para los Derechos Humanos, Roberto Campa, aseveró a El Universal que la situación de violencia que viven los periodistas no es la peor por la que atraviesa el gremio.

Detalló que en el mandato de Felipe Calderón hubo más periodistas que perdieron la vida en comparación al sexenio actual y al menos 10 periodistas muertos en el último año de Vicente Fox.

Roberto Campa aseguró que las condiciones de violencia que presenta México están vinculadas con las drogas, con el trasiego de sustancias a Estados Unidos y también cada vez más con la presencia de drogas y la batalla de narcomenudeo.

Este fenómeno de violencia comienza en la parte final de la administración del presidente Fox y se recrudece de manera muy importante en la administración pasada. Felipe Calderón lo recibió con 10, lo entregó con 22, este gobierno arrancó con esos 22 y lo pudo bajar alrededor de 15 o 16; en el tercer año hubo un incremento en la última etapa que se explica a partir de ciertas variables, dijo el subsecretario.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) señaló que por encima de 10 homicidios por cada 100 mil habitantes la situación de violencia es una epidemia.

“Cuando una organización de la delincuencia no solamente priva de la vida a personas sino que además la expone públicamente, muestra cuerpos mutilados, lo que hace es una intención de propaganda y muchas veces los medios que dan a conocer esta información con este criterio noticioso saben que corren un riesgo, es una situación muy compleja”.

Campa reconoció que el Mecanismo de Protección para Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas no han sido capaz de ganarse la confianza de los periodistas. Todos lo que han muerte no han formado parte de éste, debido a la desconfianza que los comunicadores sienten del gobierno y “eso hace más difícil que se pueda dar este acercamiento”. Otro tema es el de la justicia y la impunidad.  Muchos de los periodistas privados de la vida han quedado en la burocracia o en el olvido.

El mecanismo está buscando que en las entidades federativas se haga un esfuerzo para identificar quiénes son periodistas en su Estado que están en condiciones de riesgo. Asimismo, reveló que está trabajando a la velocidad máxima en las investigaciones de las agresiones, “sabemos que investigar eficazmente estos casos es un reto para el Estado, no solamente en el gobierno federal”.

Habló del caso del fotoperiodista Rubén Espinosa, asesinado en la Ciudad de México en julio de 2015, e indicó que el mecanismo identificó que estaba en situación de riesgo cuando salió de Veracruz, y le pidió a organizaciones de periodistas que se acercaran a él para atraerlo al mecanismo, desafortunadamente muy poco tiempo después sucedieron estos hechos en la colonia Narvarte.

Por último, comentó que hay 557 personas involucradas al mecanismo, 300 defensores y poco más de 200 periodistas.