En momentos en que Donald Trump hace cambios en su equipo legal para contraatacar las investigaciones de la trama rusa, Sean Spicer, vocero de prensa de la Casa Blanca, renunció por un desacuerdo en la nominación de Anthony Scaramucci, como director de comunicaciones del gobierno.

Spicer rechazó la propuesta del mandatario estadounidense de que quedarse en el puesto, argumentando que Trump ha cometido un “gran error” al designar a Scaramucci.

Según el diario The New York Times, el mencionado nuevo director de comunicaciones, de 52 años, es el fundador de la firma internacional de inversiones SkyBridge Capital, era el ejecutivo principal de estrategias del Eximbank (Export-Import Bank of the United States, agencia de créditos para exportaciones de EE.UU.),  y trabajó en el Comité Ejecutivo del Equipo de Transición Presidencial de Trump.

Hasta este momento, Spicer era prácticamente el portero que le paraba todos los goles que cometía Trump. Era considerado como el hombre de los “hechos alternativas”, pues era quien resolvía los problemas causados por las mentiras y declaraciones erróneas de Donald Trump.

El diario neoyorquino apunta que Spicer estaba “vehemente en desacuerdo” con esa determinación.