Desde 1983, Raúl Flores Hernández, mejor conocido como “El Tío”, trabaja en el narcotráfico señaló el Departamento de Justicia de Estados Unidos quien lo señaló como “el gran capo que menos conocemos”. “El Tío” lavó dinero para los cárteles de los Beltrán Leyva, de Sinaloa y Jalisco Nueva Generación.

De acuerdo con el Departamento de Tesoro de Estados Unidos, Flores Hernández es presunto “líder de una organización delictiva dedicada al lavado de activos y distribución de drogas”. Dicho departamento acusó al futbolista Rafael Márquez y al cantante Julión Álvarez de ser prestanombres o testaferros del narco.

El narcotraficante cuenta con una largo historial como operador financiero y contacto con proveedores sudamericanos para los cárteles ya mencionados, mismos que se han disputado el control territorial, dejando miles de muertos.

Estados Unidos lo acusa por tráfico de cocaína y lavado de dinero. En México, la Procuraduría General de la República (PGR) ofrecía una recompensa por “El Tío”, por delincuencia organizada, operaciones con recursos de procedencia ilícita, posesión de arma de fuego y cartucho reservados para uso exclusivo del Ejército, Armada y Fuerza Aérea.

La PGR lo ha tenido en la mira desde hace 10 años aproximadamente. En 2013 fue incluido en la lista de objetivos prioritarios detenidos, semanas después la Comisión Nacional de Seguridad ya no tenía esa información.

Flores Hernández fue detenido en 2013 pero salió de prisión al año siguiente, según informes de altos funcionarios estadounidenses.

El Departamento de Tesoro de Estados Unidos cuenta con documentos del registro de la propiedad en los que Rafael Márquez aparece como propietario de empresas en las que son socios el narcotraficante y sus hijos.

El gobierno de Estados Unidos asegura que Márquez y Álvarez han colaborado con “El Tío” por años para limpiar dinero de organizaciones delictivas.

Además, la Federación Mexicana de Futbol registró a “El Tío” como presidente del club Guerreros Autlán, en segunda y Tercera División, hasta el verano del 2008 fecha que el organismo “desapareció” la franquicia que después se convirtió en el equipo Oro.

El Departamento del Tesoro de EU reveló que el presunto narcotraficante y sus socios usaron una treintena de empresas en Jalisco para lavar dinero.