Desde que se aprobó la semana pasada la conformación del Frente Ciudadano por México —integrado por PAN, PRD y Movimiento Ciudadano— la encuestadora Parametría señaló que aun sin candidato presidencial habría obtenido un 32 por ciento de los votos seguida de la probable alianza entre Morena y el PT con 23 por ciento, y el PRI y sus aliados en tercer lugar con 15 por ciento de intención de voto. Lo que muchos se preguntan es qué sucedería en la Ciudad de México —bastión pejista—  con un candidato por el Frente que pudiera resultar atractivo y con clientela política.

El nombre del delegado en Cuauhtémoc, Ricardo Monreal, se baraja en los corrillos políticos, que si se va ir como candidato al gobierno de la CDMX por el Frente, que si esperará alguna señal de Andrés Manuel López Obrador para mantenerse en Morena. Lo cierto es que Monreal ha reconocido que su ciclo en Morena está concluyendo, luego de una encuesta opaca para elegir candidato al gobierno CDMX, seguida de un silencio de Andrés Manuel —a quien Monreal ha acompañado desde hace 20 años—, para que este le sentenciara “estás con Morena o con los corruptos”.

Siempre! charló con Monreal Ávila en su despacho de la delegación Cuauhtémoc sobre el giro que tomará su vida política en los próximos días.

Usted ha sido un hombre de lucha, ¿está viviendo hoy con Morena una situación parecida a la de su salida del PRI? ¿Qué sentimientos tiene?

Hace 20 años renuncié al PRI, fue una etapa muy complicada en ese momento pero no como ahora, porque recuerdo bien los motivos de mi renuncia: fueron la imposición y el maltrato. Luego vino una campaña sucia, terrible en mi contra por parte del sistema, no solo del PRI.

En aquel tiempo, te cerraban todos los espacios, era una persecución directa del sistema y del gobierno, del presidente. Lo superamos porque luego de la renuncia, la gente de Zacatecas decidió apoyarnos y ganamos a la buena. A 20 años de distancia hoy siento esta experiencia con mayor dolor; es una etapa dolorosa porque yo fundé esta organización, Morena; la fundé junto con mi familia y con miles de mexicanos y mexicanas que acudimos a las asambleas, que caminamos y que construimos.

Yo sí soy fundador y me siento una parte original de Morena. Tener que tomar una decisión de conclusión de un ciclo político, me duele y me genera un sentimiento encontrado y eso ha provocado que tarde en la definición política que tomaré en los próximos días.

La actitud de Andrés Manuel, de silencio y, de repente, habla y pega…

Hace nueve semanas que no hablo con él, no tengo ninguna comunicación ni telefónica, ni mensaje directo o indirecto. Me hubiera gustado que el mensaje que envió desde Nueva York, concretamente a mí, hubiese sido bueno, que hubiera dicho: mando un mensaje de conciliación: Ricardo, te necesitamos, no te vayas, luchemos juntos por el proyecto de nación.

Algo de más aliento, no: ¡vete!, ¡decide tú!, ¡si te vas, te vas con los corruptos! Hubiese sido más agradable que enviara un mensaje de unidad, de decir: vamos a seguir luchando, tienes 20 años en el movimiento, no puedes olvidar todos estos episodios de lucha. Busquemos la alternativa de solución para que no te vayas; cosas así.

Si Andrés Manuel antes de la encuesta le hubiera dicho que no era para usted el puesto…

Hubiera evitado todo esto, lo digo con toda honestidad.

Algunos señalan que lo que pasa es que se le quiere subir a las barbas a Andrés Manuel.

Nunca lo he hecho y nunca lo hice en 20 años. Reconozco a Andrés Manuel como el hombre con más autoridad moral para ser presidente de la república, pero hubiera bastado que una semana antes me hubiera dicho: Ricardo, vamos sentándonos, tú no puedes ser, deja que sea fulano de tal. Nunca me lo dijo, y eso me parece, en política, una falta de cuidado de las formas, que es fondo. Esa parte no se está cuidando en Morena y se está lastimando a dirigentes que no quieren irse pero que, por dignidad, por decoro no pueden quedarse, como es mi caso.

¿Habría otros más…?

No lo sé, quizás otros piensen de manera distinta, creo que es una falta de operación política, de cortesía y de trato, no es por los puestos ni por los cargos, en política lo que cuenta es la cortesía y la buena forma, ante eso nadie se resiste.

Llama la atención que sigue defendiendo a Andrés Manuel y, sin embargo, la nomenclatura, Polevnsky, Sheimbaum y el propio hijo de Andrés Manuel, le habrían cerrado caminos…

Les deseo suerte. Sheimbaum es una buena científica, le deseo suerte; a Andrés, que Dios lo ayude; a lo mejor yo ya no estaré en el acompañamiento.

Se señala que el hijo de AMLO se ha metido mucho en este asunto…

Andy es un muchacho brillante, lo conocí porque trabajó conmigo en el Senado, es un muchacho con talento, con capacidad, no sé en qué grado esté inmiscuido, pero lo que sé decir es que les falta operación política, cortesía, trato con los dirigentes, a los militantes, al más modesto hay que tratarlo con respeto, y no se está dando. Todos los que fundamos Morena lo hicimos con el propósito de buscar un nuevo quehacer político, donde te respetaran y juntos lucháramos por la transformación del país. Ahora los puestos, las formas y el trato nos están alejando.

Algunos analistas plantean que el hijo de Andrés va para 2024 y que se hizo una limpieza porque Monreal puede ganar la CDMX y luego competir por la presidencia…

Lo que quiero es ser jefe de Gobierno, tengo un plan A, no lo he cambiado, y lamento que estemos en esta situación. Estoy por finalizar un ciclo de mi vida política luego de 20 años, donde tendré que definir con plena libertad si acepto los ofrecimientos de algunos otros institutos políticos para contender en este mismo plan A. No lo he definido, lo tendré que hacer en unos días.

¿Qué tendría que pasar para aceptarlo? Hay gente entusiasmada con su candidatura.

Tendrían que pasar dos cosas: uno, cerrado el expediente de Morena y habiendo definido mi futuro, iniciar el proceso de construcción. Quiero cerrar bien los expedientes, soy un político, un hombre formal al que no le gusta dejar abierto ningún expediente.

¿Qué significa cerrar ese expediente con Morena?

Concluir la etapa, el proceso, comunicarlo formalmente, esperar hasta el último momento la rectificación y, si no la hay, el cierre de expedientes. Es el plazo prudente, no se puede mantener en una indefinición permanente ni se puede alegar que, si no me contesta nunca, voy a mantenerme siempre en la misma organización cuando no hay el respeto, la cortesía, las formas, el cuidado, el decoro; que ya no quieren que estés ahí, que no eres útil; además está llegando mucho militante. Creo que es la época más importante de Morena, donde su crecimiento es evidente, la fertilidad en el campo del partido es muy importante.

Parametría sacó una encuesta en donde el Frente va por adelante de Morena en la presidencial; ahora bien, si ahí hubiera un buen candidato, ¿la CDMX no lo entusiasma?

Sí, sí, no lo descarto. No descarto los escenarios previsibles pero quizás en este momento tenga más claridad por concluir el ciclo que por construir el otro, es decir concluir un ciclo político, cerrar expedientes y luego iniciar la reconstrucción de la nueva etapa política; es lo que hago, por eso no quisiera empalmar ni traspapelar una y otra acción sino esperar; no falta mucho, hablo de dos semanas.

 

Sin embargo, hay que tener muy claro el timing

Tengo claro que la oportunidad política si no se toma, se esfuma y los vacíos en política se llenan, es una ley de la política y por esa razón creo que si no decido rápido, se olvida, se esfuma y vendrán otros actores a cubrir ese espacio. Me parece normal y lógico.

Si contendiera por el Frente seguramente encontraría resistencias en algunos partidos…

Lo he hablado. No voy a generar problemas en ningún partido no voy a generar discordia, cada partido tiene sus militantes y sus simpatizantes y sus aspirantes a ser jefes de Gobierno. Si yo soy útil en su momento, lo construiremos y participaré, y si no, no, no me va la vida en eso, porque luchamos por principios, por dignidad, no solo por cargos.

Creo que este es mi mejor momento en mi vida pública después de 40 años de actividad pública, tengo la experiencia acumulada, mi capacidad, mi lucidez esta al cien por ciento, lo mismo que mi salud, valga la modestia pero me siento con plenitud de facultades para poder atender, escuchar y resolver los problemas de la Ciudad de México de manera plural, incluyente. Es mi mejor momento, y si me va a pasar por eso la oportunidad en la toma de decisiones, tiene razón, es solo una y si no se toma, te vas a la nada o a la nota anecdótica de lo que puedo haber sido, o de lo que pasó en el tránsito de la separación de una organización política que fundaste, pero no pasará más de eso.

¿Ha contemplado una candidatura independiente?

Sí, también los escenarios están dados. Alguien de alguno de los partidos me planteaba recientemente que aceptara. Es un planteamiento que no he decidido, y lo digo como una primicia, como una actitud seria, tres partidos me plantean ser candidato ciudadano con el arropamiento de los institutos políticos que quieran.

He recibido ofrecimientos del PES, lo agradezco mucho, del PANAL, del Verde, del PES, de Movimiento Ciudadano y de un sector del PRD, incluso de un sector del PRI importante. No iría con el PRI porque entiendo que ahí sí no lo podría hacer, pero me han planteado ese arropamiento en el que no milite en ningún partido y que pueda ser el primer gobierno de coalición que en el país se pueda presentar. Es atractivo desde el punto de vista político.

Lo estoy pensando, agradezco la oferta y la interlocución de estos dirigentes pero tampoco quiero generar división en el interior de los partidos, tienen que resolver primero cada uno sus proceso internos, y si se puede construir, lo construiremos.

¿Qué otras opciones visualiza?

No hay muchas porque nada más tengo un plan A, no tengo otra perspectiva más que gobernar la ciudad, me he preparado para eso, y tengo la capacidad; halago en boca propia es vituperio, pero me he preparado, estoy en mí mejor momento para atender con una actitud física, intelectual, mental, los problemas de la ciudad, que son muchos. Si no se logra construir, sería muy lamentable pero todavía no estoy pensando en eso, ya pronto lo haremos.

Ricardo Monreal tiene adeptos en la Ciudad de México pero también en Zacatecas y en otras entidades, lo que podría resultar muy caro para Morena a la hora de la elección presidencial.

Ha tocado un tema en el que pocos han reflexionado o expresado, soy un dirigente que me formé en la provincia,  nunca había hecho política en la ciudad, sino hasta hace 2 años y medio, que este es mi primer cargo en la ciudad.

Conozco a mucha gente, respeto mucho a la militancia de Morena porque yo fui a fundar Morena en las entidades federativas, a invitar a militantes, a ciudadanos a que se incorporaran como militantes en el primer censo de Morena, en Querétaro, en Chiapas, en Zacatecas, en Baja California, en la propia Ciudad de México.

Fui como delegado especial para poder construir Morena, además de coordinador nacional de Andrés Manuel en la campaña de 2012, conozco todo el país y respeto a toda la militancia que sabe que mi situación no es un gesto de capricho ni de berrinche.

Si fuera eso ya habría aceptado cualquier cosa, la militancia sabe que estoy actuando con congruencia y que existe la nomenclatura que está excluyendo a hombres y mujeres valiosos, lo saben bien en los estados, en la ciudad, en los municipios. Lo que yo estoy haciendo es luchar por la democratización política que podrá darse o no darse, pero que no debería ser considerado como una herejía política o una osadía.

Y votos que a la hora de la elección van a costar…

No es mi deseo, y no quiero afectar nunca a Andrés Manuel, tengo que tomar mi decisión por dignidad. Mi padre, un campesino que estudió hasta el segundo año de primaria, un campesino del norte de Zacatecas me decía: hijo, si te pisotean una vez, te van a seguir pisoteando, en política nunca lo permitas, el día que lo hagan mejor retírate y no aceptes nada.

Son enseñanzas de la sabiduría política del ejercicio concreto, él nunca ocupó ningún cargo, salvo el de regidor en el municipio de Fresnillo y me dejó grandes enseñanzas, que te pesan mucho. No quiero afectar a nadie pero yo no cometí el error y estoy en una etapa de reflexión profunda. En dos semanas la vida de Ricardo Monreal cambiará.