Se cumplen 32 años del terremoto de 8.1 que derribó a la Ciudad de México. Según cifras oficiales globales, el sismo del 19 de septiembre de 1985 dejó 12 mil 747 inmuebles dañados, de los cuales el 65.4 por ciento estaba destinado a vivienda; el 14 al uso comercial; el 13 a escuelas, y el resto a servicios. Unos mil 500 edificios públicos, de los 70 mil existentes, se afectaron.
Entre los más importantes figuran el Hospital General, el Hospital Juárez, el edificio del IMSS, la Secofi, la Secretaría de Trabajo y la Secretaría de Comunicaciones y Transportes. También se dañó la Procuraduría de Justicia del Distrito Federal, los tribunales de la Junta de Conciliación y Arbitraje y el edificio de la gran comisión de la Cámara de Diputados y el Conalep.
El 19 de septiembre de 1985, el dolor, la tristeza, la incredulidad se veía en los rostros de los mexicanos al sentir el movimiento de la tierra durante más de 90 segundos interminables. Después del siniestro el país estaba de luto, el Distrito Federal sufrió las consecuencias y muchos de sus residentes tuvieron como último cobijo antes de ser sepultamos el Parque del Seguro Social, donde cajas blancas esperan la llegada de sus nuevos habitantes.
El temblor, también derribó el Centro Médico Nacional del IMSS. Se calculó que el 40 por ciento de las instalaciones habían desaparecido. Asimismo, sucumbieron los hospitales de Pediatría, Traumatología y Ortopedia y el de Ginecología y Obstetricia y las residencias médicas. Se desplomó el Hospital General de México y la torre de 12 pisos del Hospital Juárez de la entonces Secretaría de Salubridad y Asistencia.
