Se tambalea la renegociación del Tratado de Libre Comercio (TLC). El sector  empresarial mexicano abrió la posibilidad de salir de las pláticas ante las propuestas adversas que ha planteado Estados Unidos hacia el sector agroalimentario.

Al presentar la agenda pública del sector privado, Juan Pablo Castañón, presidente del Consejo Coordinador Empresarial, dijo que “existe la posibilidad de que nos levantemos de la mesa. La causa es que no podemos cumplir con lo que los socios nos piden en circunstancias que ya no son realidad de México”.

Al destacar que la mayor fortaleza de México se encuentra en su interior, aseveró que en caso de que el TLCAN se de por concluido, en el país deberá adecuar su relación con Canadá y Estados Unidos de manera de espejo, además de seguir abriéndose al mundo y conectarse con Sudamérica.

Indicó que hay que recordar que los granos traídos tanto de Estados Unidos como de Canadá se deben importar a Sudamérica, y una mayor conectividad con Europa ofrecería al país un mayor acceso tecnológico para las pequeñas y medianas empresas lo que daría un valor agregado a la economía.

Bosco de la Vega, presidente del Consejo Nacional Agropecuario (CNA), dijo que en la primera embestida de Estados Unidos contra el sector agropecuario y textil, se puso sobre la mesa el tema de la estacionalidad para las frutas y hortalizas, “ellos no quieren exportaciones de México cuando tengan producción, entonces van a poner barreras al comercio, situación inaceptable”.

Por lo que indicó que el CNA prefiere una salida digna del TLC y no tener que sostener un mal acuerdo que los marque por los próximos 25 años. Afirmó que la ventaja es que se cuentan con un plan B que son las reglas de la OMC, a través de las cuales se establecen aranceles promedio de alrededor de 4.5 por ciento.