El pleno del Senado ha aprobado por mayoría absoluta (81,6%), tan solo 45 minutos después de que el Parlament declarase la independencia, el acuerdo del Gobierno con las medidas que, al amparo del artículo 155 de la Constitución, prevén devolver la legalidad constitucional y estatutaria a Cataluña.

Así, la autorización al Gobierno se aprobado con 214 votos a favor del PP, PSOE, Ciudadanos, UPN, Foro y Coalición Canaria, frente a 47 votos en contra de Unidos Podemos, ERC, PDeCAT, PNV, EH Bildu y Compromís, y la abstención de Nueva Canarias. Se han ausentado de la votación el expresidente de la Generalidad de Cataluña y senador socialista José Montilla y su compañero de partido y expresidente de Baleares, Francesc Antich.

De esta forma, el Senado autoriza al Gobierno a destituir al presidente Carles Puigdemont y a todos los miembros de su Gobierno, así como a limitar las funciones del Parlament y a asumir el mando de los Mossos al amparo del citado artículo de la Carta Magna.

Finalmente, el PP ha aceptado dos enmiendas del PSOE para suavizar el texto, ya que se prevé modular las medidas a aplicar, incluso suspenderlas, si cesan las circunstancias que las han originado, y, por otra parte, se renuncia a controlar los medios públicos catalanes, como TV3, que seguirán dependiendo del Parlament. Tras la aprobación de las medidas, el presidente del Senado, Pío García-Escudero, ha remitido una comunicación oficial al Gobierno, a la Generalitat de Cataluña y al Congreso de los Diputados. El Gobierno ultima ya el decreto con el que las hará efectivas.

Declaración ilegal de independencia

Por su parte, el Parlament ha aprobado de forma ilegal con la mayoría de JxSí y la CUP, y con la ausencia de Ciudadanos, PSC y PP, la independencia de Cataluña. Se prevé que el Tribunal Constitucional dejará sin efectos la votación del parlamento catalán admitiendo a trámite el recurso de amparo presentado por el PSC. Igualmente, el Gobierno recurrirá ante el Constitucional la declaración de independencia.

El texto presentado por JxSí y la CUP para declarar la independencia proclama literalmente: “Asumimos el mandato del pueblo de Cataluña expresado en el referéndum de autodeterminación del 1 de octubre y declaramos que Cataluña se convierte en un Estado independiente en forma de república”. También en su preámbulo dice: “Constituimos la república catalana, como Estado independiente y soberano, de derecho, democrático y social”.

En la votación, en urna y de forma secreta, no han querido participar los diputados de Ciudadanos, el PSC y el PPC, que han salido del hemiciclo.

Después de que se constituyera una República en Cataluña, sin contar con la presencia de ningún diputado de la oposición, el presidente del Gobierno ha asegurado que “el Estado de Derecho restaurará la legalidad en Cataluña” y ha pedido tranquilidad a los españoles ante esa decisión. Mariano Rajoy, en un mensaje en Twitter, ha dicho: “Pido tranquilidad a todos los españoles. El Estado de Derecho restaurará la legalidad en Cataluña”.

El Parlament, con los votos en urna y de forma secreta los de JxSí y la CUP, ha aprobado una resolución en la que insta al Govern a dictar todas la resoluciones necesarias para desplegar el marco legal de la “república” catalana y, en cuyo preámbulo, se declara un “Estado independiente en forma de república”. 

Junts pel Sí y la CUP pidieron votar de forma secreta mediante voto por “llamada” y en “urna” por la “cultura política antirrepresiva”. Esto provocó que desde el PPC, Xavier García Albiol les llamara “cobardes”: “¿Cómo quieren proclamar la independencia si no tienen narices de dar la cara? ¿Qué independencia quieren proclamar si le tienen miedo a legalidad española?”.

Rajoy, contundente

El presidente del Gobierno ha asegurado que el Estado “reaccionará” ante la aprobación de la independencia por parte del Parlament, porque es algo que para la mayoría “no solo va contra la ley, sino que es un acto delictivo”. En declaraciones en los pasillos del Senado, Mariano Rajoy ha subrayado que el objetivo ahora es “recuperar la legalidad” ante algo que “no es posible”, la independencia de Cataluña.

Rajoy también ha destacado que España “es un país serio, una gran nación” y el Estado no está dispuesto “de ninguna de las maneras” a que algunas personas pretendan “liquidar” la Constitución, las normas de convivencia y las reglas de juego.

Por la mañana, el presidente del Gobierno ya aseguraba que “no hay alternativa” a la aplicación del artículo 155 de la Constitución ante la actitud del presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, de quien ha dicho que “él y sólo él” ha elegido este camino.

Por su parte, desde el PSOE, que ha estado en todo momento al lado de las decisiones del Gobierno, su secretario general del PSOE ha apelado al sentido común y a la racionalidad “frente a la fe irracional que predican los que conducen a Cataluña al abismo”. Pedro Sánchez ha dicho que su partido no renunciará “jamás a la España de la reconciliación” y ha señalado que por “disparatados” que sean los proyectos de muchos gobernantes “hay vínculos que prevalecerán sobre el absurdo”.