La tarde de ayer, María de Jesús Patricio Martínez, vocera de Concejo Indígena de Gobierno (CIG), encabezó un mitin en la explanada de la Biblioteca Central de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y señaló que es momento de poner fin a la larga cifra de muertos, desaparecidos y presos políticos, así como de feminicidios que hay en todo el país.

“Aquí estamos por el dolor y la rabia de los pueblos de ver a nuestros muertos, desaparecidos y encarcelados, por defender lo que para nosotros es la vida, por los miles de feminicidios, por la violencia que día a día vivimos en los campos y en las ciudades, que nos hace decir que es la hora de las mujeres y nosotras también vamos por todo”.

Ante más de 3 mil asistentes, la indígena de 57 años, originaria de Jalisco, afirmó que se necesita que la educación siga siendo gratuita y aseguró que los derechos no se deben de mendigar ni convertir en mercancías.

Señaló que los espacios educativos en todo México deben ser críticos y que la instrucción que se imparte sea científica y acorde a la realidad de una nación multicultural “porque en este país, las culturas originarias siempre han sido negadas”.

La aspirante a una candidatura independiente a la Presidencia de la República, dijo a los universitarios que es momento de seguir adelante en la construcción de un nuevo México y mundo, “porque se están cayendo y todos tenemos que aportar, porque atrás de nosotros vienen personas, hombres y mujeres, que necesitan un mejor mundo. Por eso hay que luchar”.

Marichuy, estuvo acompañada de integrantes del CIG, realizó un homenaje a Lesby Berlín Osorio, joven asesinada el pasado mayo en las instalaciones de la casa máxima de estudios, así como a todos los universitarios que han fallecido en esas instalaciones.

Araceli Osorio, madre de la joven, exigió un alto a los feminicidios y demandó la construcción de un memorial en ese espacio para recordar a las mujeres asesinadas en México. Aseguró que muchos de lo asesinatos de mujeres que ocurren en el país son contabilizados por las autoridades como suicidios, debido a que “es para no aumentar las cifras y para que no se declaren alertas de género.

Integrantes de la banda Café Tacvba, interpretaron algunas canciones para amenizar la espera de varias horas de la líder. A las 18:10 horas, Rubén Albarrán, cantante de la banda mexicana, dijo: “¡Llegó Marichuy!”, lo que desencadenó gritos de alrededor de 3 mil personas, en su mayoría jóvenes.

Aplausos y los gritos de mítines prozapatistas resonaban en la UNAM: “¡Zapata vive, la lucha sigue!”, “¡Viva el EZLN!”. Marichuy lució una corona de flores naturales y su discurso terminó con la frase zapatista: “¡Nunca más un México sin nosotros!”.