México tiene “poco o ningún” progreso para erradicar la impunidad y la Fiscalía Especial para la Atención de Delitos cometidos contra la Libertad de Expresión (FEADLE), parece vacía y carente de progreso. “Consideramos  que esto se equipara al fracaso del gobierno mexicano para cumplir con sus obligaciones, para asegurar la rendición de cuentas”, señalaron los relatores especiales sobre libertad de expresión para las Naciones Unidas (ONU), David Kaye, y de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), Edison Lanza.

A pesar de que el gobierno mexicano reconoce el grave problema que significa la violencia existente en contra de periodistas, “no ha podido asignar los recursos necesarios y demostrar voluntad política”, que permita fortalecer los mecanismos de protección existentes en la materia, afirmaron los expertos.

El país atraviesa por una situación de violencia estructural en la que el gremio vive aterrorizado, concluyeron los relatores al presentar su reporte preliminar sobre las observaciones y recomendaciones después de su visita conjunta a México, la cual se llevó a cabo entre el 27 de noviembre y el 4 de diciembre.

“Percibimos un gremio atemorizado en muchas partes de la federación, aterrorizados en algunos casos por lo que han tenido que vivir y ver, porque han perdido colegas, han sido ellos mismos objetos de diversas formas de agresión; porque tienen compañeros aún desaparecidos y es una realidad que golpea e impacta. Esto ha generado obviamente una situación de desconfianza hacia las instituciones del Estado, e incluso, muchas veces ha roto los vínculos al interior de los propios periodistas y los medios de comunicación”, comento Edison Lanza.

En su reporte preliminar de 15 hojas, las organizaciones les reportaron que 99.6% de los crímenes contra periodistas siguen sin resolverse.

David Kaye indicó que uno de los problemas más importantes es que la violencia sucede en el contexto local y estatal. Alertó, además, sobre el desplazamiento forzado en el cual los periodistas deben abandonar el lugar donde viven por las amenazas a las cuales se han visto sometidos.

En conferencia de prensa para presentar este informe, señaló que “el gobierno debe lidiar con la percepción y la realidad de que es muy inusual que se haga responsables a los  autores materiales de esta violencia. El esfuerzo nacional, que ya se ha establecido en la infraestructura, con el mecanismo de protección y la FEADLE, debe tener más recursos. Necesitamos ver un esfuerzo muy fuerte para mejorar los  recursos y la  capacidad que tiene la fiscalía”.

Insistió en que no se trata de dar más dinero a las instituciones, sino hacer que sea una prioridad nacional “que haya rendición de cuentas y que los autores materiales san responsables de los crímenes en contra de los periodistas. La otra parte significa mejorar la calidad de recursos, la capacidad y la posibilidad de que la FEADLE realice su trabajo a niveles locales”.

Los relatores de los organismos internacionales afirmaron que en comparación con otros países del mundo donde hay conflictos armados y autoritarismo, como Siria, México “sale peor parado”, puesto que es un régimen democrático que aspira a convertirse en un país desarrollado.