El 2017 no sólo fue el año más violento, sino también el de mayor robo de autos asegurados que se tiene registro en el país. Se calcula que las aseguradoras pagarán en indemnización más de 12 millones de pesos.

Según datos de la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS), en México se reportaron 90 mil 187 unidades hurtadas el años pasado, lo que significó el despojo de una unidad cada seis minutos.

La AMIS detalló que gran parte del fenómeno se debe al proceso de ajuste que vive el país para implementar el Sistema de Justicia Acusatorio, aunado a la presencia del crimen organizado que utiliza autos robados para cometer otros ilícitos.

El director general del organismo, Recaredo Arias, destacó que el total de autos robados el año pasado representa un aumento de 27.2% en comparación con 2016 y del periodo comprendido entre 2012 a 2017 alcanza las 426 mil 328 unidades despojadas.

Dijo que es factible que se mantenga la tendencia en 2018, porque al tratarse de un año de elecciones presidenciales se pierde continuidad en el trabajo de las dependencia relacionas con el tema, situación recurrente en procesos electorales

Arias señaló que se ha detectado el uso de autos robados para campañas por parte de partidos políticos, donde los últimos casos reportados se presentaron en Guerrero, Morelos, Michoacán y Puebla.

La AMIS destaca que en México el robo de autos se presenta en una de cada 200 unidades aseguradas, siendo el martes y miércoles los días preferidos por los delincuentes para efectuar esta actividad.

Apuntó que 2017 también fue un año con más número de unidades de autotransporte robadas, particularmente en Puebla y Veracruz, debido al robo de gasolina y mercancías.

Recaredo Arias aseguró que esta situación se expuso ante el Consejo Coordinador Empresarial y la Secretaría de Gobernación, además de que buscan promover cambios de leyes que mitiguen el robo de autos.

Agregó que la presencia del crimen organizado en el robo de autos ha llegado a casos extremos, porque hace seis años se recuperaron coches mexicanos en Europa.

La delincuencia también traslada estos autos a Centroamérica –Nicaragua, Guatemala, El Salvador y Honduras-, donde los utiliza para otros ilícitos, así como falsifica documentos para venderlos.

(Con información de El Universal)