El Papa Francisco pidió perdón  y expresó su “dolor” y “vergüenza”  por el daño irreparable causado a niños por sacerdotes pederastas. Así lo manifestó en el Palacio de la Moneda donde fue recibido por la presidenta saliente, Michelle Bachelet, suscitando aplausos de los asistentes.

El pontífice se reunió en privado con víctimas de abusos sexuales del clero, informó, el Vaticano. Las víctimas “contaron sus sufrimientos al Papa Francisco, quien les ha escuchado y ha rezado y llorado con ellos”, mencionó un comunicado divulgado por la Santa Sede.

En Chile, casi 80 religiosos abusaron de menores, según una lista distribuida en días pasados por la ONG estadounidense Bishop- Accountability. Por ora parte. Juan Carlos Claret, vocero de la asociación Laicos de Osorno, lucha para que se expulse al obispo Juan Barros señalado como encubridor de el cura Fernando Karadima quien cometió abusos sexuales contra menores  y quien fue denunciado en 2010 por varias de sus víctimas.