Ante la inseguridad en Guerrero, Michoacán, Tamaulipas y Veracruz, el Instituto Nacional Electoral (INE) y la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales (Fepade), informaron que estos cuatro estados son considerados como zonas de riesgo para las elecciones federales de 2018.

Este es el tercer año consecutivo que estas mismas entidades, al igual que Chihuahua, aparecen en el listado de alerta por la inseguridad que se registra, lo que hace que en esta ocasión se convierta en un “foco rojo” para la organización de las elecciones, por lo que se les recomienda solicitar el respaldo de autoridades de seguridad pública.

Entre las advertencias que la autoridad señala se encuentra la vulnerabilidad para la seguridad de los funcionarios de casilla, así como para la movilidad de autoridades y votantes que participen en le elección federal.

Del mismo modo, indica que en seis de las nueve entidades donde se elegirá gobernador la inseguridad repuntó, de acuerdo a los reportes del último mes que se tienen sobre inseguridad en el país. Estas entidades son: Guanajuato, Jalisco, Ciudad de México, Morelos, Puebla, y Veracruz.

Sin embrago, el documento que publica Excélsior también indica que los focos no detendrán el proceso electoral, pues pese a la inseguridad en ninguna de esas entidades existen riesgos de crispación social, como ocurría en Chiapas y Guerrero en 2012.

Mientras este año existe alerta en cinco estados, en los comicios de 2006 había problemática en siete entidades: Tamaulipas, Sonora, Sinaloa, Veracruz Guerrero, Michoacán y Baja California Sur. En 2012 los altos índices de inseguridad se registraban en nueve entidades: Guerrero, Tamaulipas, Chihuahua, Veracruz, Michoacán, Sinaloa, Zacatecas, Chiapas y Durango.