Los recursos económicos que debieron utilizarse para el repoblamiento ganadero en beneficio de pequeños productores del estado de Chihuahua, afectados por diversos fenómenos meteorológicos, fueron destinados sí a repoblar, pero el rancho del exgobernador de la entidad César Duarte Jáquez.

El hallazgo de la Fiscalía Estatal de Chihuahua en cuatro ranchos ubicados en el municipio de Balleza, los cuales son propiedad de Duarte Jáquez, es —por el ángulo que lo veas— absolutamente indignante.

Los cuatro ranchos asegurados son: El Rebaje, con una superficie de más de 466 hectáreas; Mesa de Chávez, de 755 hectáreas; El Agostadero de Moreno, de más de 572 hectáreas de superficie, y Rancho de Enmedio, de 551 hectáreas.

Con estas cuatro, suman 20 las propiedades aseguradas a Duarte en zonas urbanas y rurales, que representan una superficie de alrededor de 40 mil hectáreas en total.

Además, al exgobernador le aseguraron 450 reses, algunas de ellas con aretes provenientes de Nueva Zelanda, así como animales exóticos y de colección, entre ellos, por lo menos 30 bisontes, cinco llamas y manadas de jabalíes.

Los inmuebles cateados son predios rústicos para hatos ganaderos con cascos de rancho que comprenden cuatro casas habitación, sistema de riego, corrales equipados y celdas solares.

Es imposible que, con sus ingresos como gobernador, César Duarte haya podido adquirir tal cantidad de bienes valuados en al menos 60 millones de pesos. Entonces, la duda legítima de la ciudadanía es: ¿de dónde salieron los recursos económicos para obtenerlos? ¿Provienen de las arcas públicas?

Para dar una especie de respuesta a todas estas dudas, la defensa del exgobernador acusó, a través de una carta, al actual gobernador de Chihuahua, Javier Corral, de hacer señalamientos infundados y malintencionados en contra de su cliente.

En el texto, el representante legal de Duarte aseguró que la presión psicológica ha sido el mecanismo de investigación y construcción de acusaciones, en donde se presume protagonismo y actividad mediática del actual gobernador.

La defensa aseguró que el aseguramiento de cuatro supuestos ranchos, lo que en realidad son bienes rústicos que pertenecen a una misma propiedad denominada San Rafael del Agostadero o Agostadero de Jáquez o Agostadero de Moreno; que son potreros y no ranchos, y que han pertenecido muchos de ellos a la familia del exgobernador, desde hace casi 100 años.

Se precisó que el ganado es criollo, nacido en esa propiedad y no de origen en Nueva Zelanda como se ha informado, ni ha tenido recursos públicos, ni federales ni estatales.

Por su parte, el gobernador Javier Corral Jurado informó por medio de sus redes sociales que los ranchos fueron adquiridos directamente por César Duarte durante su administración, al tiempo que exhortó de nueva cuenta al gobierno federal a que actúe sobre las solicitudes de detención con orden de extradición  contra Duarte Jáquez.

Los reclamos de Corral son claramente demagógicos, pues hasta ahora existen ya tres órdenes de extradición contra César Duarte, y aunque se especula de su estancia en Estados Unidos, porque ya se han cateado casas en El Paso, Texas, la Interpol no lo ha localizado.

Es decir, las autoridades mexicanas ya solicitaron su detención con fines de extradición, la razón por la cual no se ha concretado les es ajena, ya que simplemente no ha sido localizado por las autoridades a quienes les corresponde dicha tarea.