Las redes sociales no solo han significado un impulso a la libertad de expresión o a la posibilidad de que cualquier persona pueda comunicarse con otras. También representan un riesgo a nuestra privacidad por la gran cantidad de información que compartimos al publicar nuestras emociones o gustos personales, además de nuestras actividades diarias.

Empresas como Facebook o Google recopilan estos datos para construir perfiles de cada uno de nosotros, con lo cual pueden conocernos mejor que nuestros amigos o familiares. Esto tiene un impacto en nuestras preferencias, como en el tema electoral, pues tomamos decisiones con base en la información de nuestro entorno, y las redes sociales sintetizan muy bien este entorno.

Esto cobra relevancia en relación con el escándalo que rodea a Cambridge Analytica y Facebook.

Previamente a la elección presidencial de Estados Unidos, Cambridge Analytica —en cuya dirección participaba Steve Bannon, más tarde asesor de Trump— tuvo acceso a los datos de 50 millones de estadounidenses con los que construyó perfiles para diseñar mensajes que influyeran en su voto.

“Por qué en Colombia ganó el no; porque Uribe contrató a personas que utilizan esta información para dirigirse a los votantes, viendo qué odian y con eso diseñar el mensaje. Eso es manipulación”, comentó en relación con este tema Carlos Salazar.

“El Internet no está regulado por el INE y se convierte en un caldo de cultivo para la información completamente dirigida a enfocar al adversario como un enemigo, una amenaza; en ese sentido se avizora un panorama complicado”, completó Norma Pareja.

“Cuando Julian Assange aseveró que Facebook es la «máquina de espionaje más espantosa jamás inventada», las afirmaciones del perseguido fundador de WikiLeaks fueron consideradas como propias de la ciencia ficción”, señaló en un artículo reciente Octavio Islas, investigador especializado en Internet y las tecnologías de la información.

El temor es que la información que día a día compartimos en redes sociales se pueda usar para manipularnos y que nuestras decisiones serán fruto de nuestra parte emotiva y no de un proceso de análisis y reflexión.

Un dato para redondear. Donald Trump nombró a Brad Parscale como su coordinador de campaña en busca de su reelección en 2020. Parscale creó el portal de Trump para la campaña en 2015 y ha repetido en varias ocasiones que el actual mandatario ganó gracias a Facebook, en cuya red difundió entre 50 y 60 mil mensajes diarios por un año dirigidos a los usuarios con variantes en las cuales podían prometer algo a unos y lo contrario a otros.

“La única forma de tener una democracia fuerte es que la gente oiga todas estas ideas y tome sus propias decisiones”, afirmó Ann Ravel, exmiembro de la Comisión Federal Electoral de Estados Unidos. “Con el microtargeting, eso no sucede”, completó.

Y el microtargeting es, precisamente, la especialidad de Cambridge Analytica.

@AReyesVigueras