Cerca de 120 mil millones de pesos sería el costo de una eventual cancelación de la nueva terminal del aeropuerto capitalino. Federico Patiño, director de Grupo Aeroportuario de la Ciudad de México (GACM), explicó que debido a las penalizaciones en caso de una anulación del proyecto se tendría que gastar esa cantidad que es la mitad del valor total de la terminal, pero sin ella.

En conferencia de prensa, junto con Eduardo Sánchez Hernández, vocero de la Presidencia de la República, detalló que hasta el momento se han invertido 40 mil millones de pesos, cifra que al final del año llegará a 70 mil millones, por lo que una cancelación incluiría la inversión ya hecha, más penalizaciones, demandas y liquidación del personal.

Tras asegurar que la construcción se encuentra blindada contra la corrupción, negó que la próxima administración que llegue al gobierno federal pueda enfrentar presiones financieras para terminar la obra.

“Se está construyendo con total apego a la legalidad; todo es público, transparente, es una caja de cristal a través de la cual cualquier ciudadano puede consultar y acceder a la información de los contratos, licitaciones y avances de la obras”.

Por su parte, Eduardo Sánchez Hernández, vocero de Los Pinos, señaló que en caso de darse alguna anulación del proyecto se perderían cerca de 70 mil empleos que al final de año existirían en el nuevo aeropuerto, además de las 450 mil plazas que se tendrían en el periodo de mayor intensidad de la construcción.

Destacó que incrementar la capacidad de la base militar de Santa Lucía, que se ubica en el Estado de México, es inviable por lo que cancelar, como propone el candidato presidencial Andrés Manuel López Obrador, “es una barbaridad”.