El magnate y fundador de Facebook, Mark Zuckerberg de 33 años, vestido con traje oscuro en vez de su habitual camiseta gris y pantalones de mezclilla compareció ante la Cámara de Representantes de Estados Unidos en una sesión por demás controvertida para representar y defender a su empresa Facebook, acusada de haber permitido la filtración de datos personales de 87 millones de personas en todo el mundo, violando los derechos de los usuarios.
El tono de los legisladores demócratas fue por demás intenso, era un juicio no solo a la empresa de Zuckerberg sino también a Internet, donde el abuso de los vacíos legales crece a pasos agigantados frente a la falta de una regulación en la materia. Sobre todo cuando el joven magnate había señalado que su empresa estaba blindada legalmente ante casos de tráfico de menores, versión que destruyó Cambridge Analytica.
En la sesión, el joven millonario, visiblemente nervioso, reconoció que no calibró de manera lo “suficientemente amplia” su responsabilidad frente a situaciones como el uso no consentido de los datos de millones de usuarios a cargo de Cambridge Analítica, la empresa de consulta electoral que trabajó para Donald Trump en las elecciones presidenciales de 2016. Pidió perdón, “fue mi error y lo siento”, declaraba.
Dijo también que su empresa trabaja con el equipo de la fiscalía que encabeza Robert Mueller mano con mano para apoyar las investigaciones sobre la posible injerencia de Rusia en las elecciones que dieran el triunfo a Donald Trump. “Hay gente en Rusia cuyo trabajo es tratar de explotar nuestros sistemas, y otros sistemas cibernéticos” señaló y lo comparó con una carrera armamentista donde los avances de los rusos “deben obligarnos a mejorar más”.
Zuckenberg — uno de los mayores donantes del presidente de la Cámara de Representantes, el republicano Paul Ryan y de Nancy Pelosi, líder de la oposición—reconoció como un craso error, no haber informado de manera inmediata a los 87 millones de usuarios afectados que sus datos habían sido sustraídos así como la responsabilidad de la empresa de permitir que las aplicaciones instaladas en su red, accedieran a los datos.
El presidente de asuntos judiciales de la Cámara de Representantes, el republicano John Thune, dijo que será una lucha larga donde no existe la claridad de que los usuarios de Facebook puedan tener los instrumentos para tomar las decisiones que les corresponden. Lo cierto, apuntó el legislador Chuck Grassley, que lo fundamental es reforzar los estándares de privacidad.
Ahora, los responsables de Cambridge Analytica deberán comparecer ante los senadores.
La citada empresa sufrió la baja del director ejecutivo Alexander Tayler, quien a su vez sustituyó al CEO Alexander Nix, quien fuera suspendido luego de que se revelará el robo de datos de usuarios de Facebook. Tayler retomará sus tareas como director de datos para centrarse en las investigaciones técnicas de que son objeto.