El “próximo secretario de Seguridad Pública Federal”, Alfonso Durazo, nombrado así por el candidato a la Presidencia de la República, Andrés Manuel López Obrador, compró una propiedad de lujo a Amado Carrillo Barragán, hijo del difunto narcotraficante Amado Carrillo Fuentes, “El Señor de los Cielos”, reveló El Financiero.
El inmueble fue adquirido en febrero de 2012, a través de la ‘Inmobiliaria Alta Sierra’, de la cual Durazo se exhibió como administrador único y director general de la empresa.
Durazo pagó dos millones de pesos por la propiedad ubicada en Bahía de Kino, Sonora. Es un lote de terrero urbano, con una construcción, que se localiza en una zona de lujo, en avenida Mar de Cortés.
Documentos obtenidos por el diario afirman que el predio tiene una superficie de 350 metros cuadrados y se encuentra debidamente registrado ante las autoridades. Cuenta con vista al mar tiene azulejos en muros de baños, losetas cerámicas, puertas de madera, acabados en aluminio y chapas de seguridad.
“Que me investiguen por lavado de dinero, la operación fue con dinero lícito, de buena fe y se hizo con Gabriel Mendoza, no con ningún Amado Carrillo”, aseguró #PorLaMañana @AlfonsoDurazo https://t.co/KaPumsqQDG
— Ciro Gómez Leyva (@CiroGomezL) 20 de abril de 2018
La compra-venta de la propiedad se formalizó en la Notaría Pública número 4 de la ciudad de Hermosillo, cuyo titular, Miguel Ángel Murillo Aispuro, dio por cubiertos todos los requisitos presentados, revelaron registro oficiales.
Carrillo Barragán informó que el inmueble lo adquirió a través de su padre, “El Señor de los Cielos”, y su madre Sonia Barragán Pérez, cuando él aún era menor de edad.
En entrevista telefónica con Ciro Gómez Leyva, uno de los hombres más cercanos a AMLO aseguró que sí compró la propiedad, pero no a esa persona, sino a Gabriel Mendoza Gutiérrez. Dijo que no teme que lo investiguen por lavado de dinero, y que no tiene nada que ocultar.
Durazo manifestó que la operación se trató de “buena fe”, con dinero lícito y frente a notario público. “La operación fue con una inmobiliaria, con el señor Gabriel Mendoza, no con ningún Amado Carrillo”, quien aseguró desconoce “y que en todo caso el comprador no tiene la obligación de investigar al vendedor”.
Reveló que el notario que certificó la compra-venta de la propiedad es ahora controlar general del gobierno de Sonora encabezado por Claudia Pavlovich.
Durazo atribuyó los ataques a sus recientes criticas al gobierno de Sonora, calificado como el “más corrupto del país”.
Aseguró que la propiedad no es de él sino que participó como representante de una empresa inmobiliaria junto con otros socios, con quienes tiene una participación importante y, en este sentido, dijo, si quieren investigarlo por lavado de dinero “que lo hagan, no oculto nada”.
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