Conversaciones telefónicas sostenidas entre jefes del cártel Guerreros Unidos y sicarios en Iguala, Guerrero, arrojaron que la noche del 26 de septiembre de 2014 habrían sido desaparecidas entre 50 y 60 personas y no 43. Hubo seis muertos más y policías de ese municipio, Cocula y Huitzuco participaron en auxilio de sicarios de esa banda del crimen organizado.

Jefes de esa organización criminal dieron órdenes desde Chicago de involucrar a policías en la detención de estudiantes y de pedir apoyo del Gobierno de Guerrero ante la magnitud del conflicto desatado, reveló el periódico Reforma.

Dichas conversaciones, interceptadas por agencias estadounidenses con autorización de un juez, forman parte de un expediente judicial con el que se procesa a ocho operadores de Guerreros Unidos en Chicago. Encarcelados en Illinois por tráfico de droga y que no han sido interrogados por los hechos de la noche del 26 de septiembre.

Junto con la agresión de Guerreros Unidos hacia los estudiantes de Ayotzinapa, movilizados en Iguala, ocurrió un enfrentamiento armado con un grupo de Los Rojos, en el que hubo por lo menos seis muertos.

Los integrantes de la organización criminal, Guerreros Unidos, creían que un grupo de Los Rojos, enviados por Santiago Mazari, alias “El Carrete”, pretendía tomar la plaza de Iguala y supusieron que la movilización estudiantil era parte de la operación rival.

Los mensajes escritos desde un Blackberry se encuentran en poder de la Procuraduría General de la República (PGR) y parte de ellas fueron compartidas con la Comisión Interamericana de Derechos Humanos y familiares de los 43 estudiantes de Ayotzinapa.

Algunas transcripciones aportadas por el Gobierno de Estados Unidos a las autoridades mexicanas y obtenidas por el diario Reforma revelaron que los jefes en Chicago tienen versiones diferentes del número de desaparecidos e ignoran el paradero. Se habla de “60 paquetes” en alusión al número de personas capturadas y posteriormente desaparecidas, 17 más que los 43 normalistas hasta ahora conocidos.

Pablo Vega, uno de los líderes criminales en Chicago, afirmó con “Covra”, una semana después de los hechos que hay “50 chavos desaparecidos. “Covra” responde: “En la madre. Tantos dónde los metieron? Tantos”.