El secretario de Gobernación, Alfonso Navarrete Prida, admitió ayer que las ejecuciones en la Ciudad de México (CDMX) han ido al alza consecuencias de la disputa de territorios por parte de organizaciones delictivas.

“Las ejecuciones en la CDMX sí han ido aumentando, y se ha actuado en coordinación con las fuerzas policiales de la propia Ciudad, particularmente en Tláhuac, en el desmembramiento de la principal organización criminal dedicada a narcomenudeo y comandada por una persona cuya alias era “El Ojos”, indicó.

Cuestionado sobre la presencia de cárteles del narcotráfico en la CDMX, Navarrete Prida, dijo que no entraría en esa polémica.

El funcionario informó también sobre la detención en Zapopan, Jalisco, de Gerardo Botello Rosales, jefe regional del cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) en Guanajuato y Michoacán. La captura, reveló, permitió el aseguramiento de 270 kilogramos de cocaína en Tláhuac.

Botello fue aprehendido como parte del operativo que permitió la detención de Rosalinda González Valencia, esposa de Nemesio o Rubén Oseguera Cervantes, líder máximo del CJNG.

 Ejecuciones al alza

El diario Reforma publicó que, con el sello del narco, al menos 143 personas han sido ejecutadas en la capital del país en lo que va del año. Solamente en los primeros 24 días de mayo iban 39 casos, siendo el mes con mayor número de narcohomicidios.

Aunque la mitad se han registrado en delegaciones de la zona oriente, las ejecuciones se extienden a 15 de las 16 delegaciones de la Ciudad. Tres de cada 10 narcohomicidios son en delegaciones del sur de la Ciudad y el 10% del total han ocurrido en la Cuauhtémoc.

Gabriel Regino, exsubsecretario de Seguridad Pública de la CDMX, dijo que los niveles de violencia desatados por la disputa del territorio por la venta de drogas indican que ya no hay un control en la seguridad que inhiba la operación de estos grupos delictivos.

Por su parte,  Ernesto López Portillo, secretario técnico del Foro Mexicanos para la Seguridad Democrática, indicó que también la disputa electoral es un factor de distracción de la autoridad.

“Hay evidencia de que los procesos electorales generan vacíos en los tramos de responsabilidad en las instituciones de seguridad pública y procuración de justicia. Vacíos que provocan el reacomodo de organizaciones criminales y la exhibición de poder; precisamente derivados de esos relevos asociados a los procesos electorales”, señaló.

Entre las delegaciones que han registrado más ejecuciones en lo que va de 2018, se encuentran: Gustavo A. Madero (31),  Iztapalapa (27), Cuauhtémoc (12), Venustiano Carranza (12), Xochimilco (7), Tlalpan (6), Coyoacán, Iztacalco, Tláhuac, y Miguel hidalgo con 4 cada una.

(Con información de Reforma)