Grupo México aseguró que de imponerse un gobierno populista se tendrán graves afectaciones al país, por lo que tomará medidas “precautorias” para asegurar la continuidad de su negocio.

La compañía minera más grande del país, dirigida por Germán Larrea, hizo un llamado a sus empleados para que efectúen un voto razonado. Además, aseguró que  hará diversos trabajos como ahorro, pago de deuda en dólares y cautela de sus inversiones futuras para asegurar la salud de la empresa y la seguridad de sus empleados.

La empresa hizo un llamado a sus colaboradores y les recomendó tomar medidas en el cuidado de su gasto familiar porque, aseguró, los principales perjuicios que se tendrán con la imposición del modelo económico populista serán desincentivar inversiones, devaluación de la moneda y fuertes alzas de precios en los productos y servicios.

En una carta enviada a sus trabajadores, accionistas y colaboradores, Grupo México afirmó que actualmente han escuchado con preocupación propuestas de estatización de empresas, derogación de reformas energéticas y educativa. “Entre otras ideas que significan un retroceso de décadas y el regreso a un modelo económico que está más que probado que no ha funcionado en varios países; Venezuela, Argentina, Cuba y Rusia, entre otros, son testigo de ello”.

Señaló que el modelo económico populista afectará el desarrollo y bienestar del país, de la economía familiar y de las empresas en su conjunto.

Por su parte, el candidato por Morena a la Presidencia de la República, Andrés Manuel López Obrador, respondió y tachó al empresario de un “traficante de influencias” y de hacer su fortuna por ser de los predilectos del gobierno.

“A pesar de todo le digo a Germán Larrea que no le guardo ningún rencor, soy partidario del amor y del perdón y que no ande asustando a nadie y que él mismo no tenga miedo, vamos a triunfar y se va a dar garantías a la inversión, no se va a afectar a ningún empresario, lo único que queremos es que se acabe la corrupción y el influyentismo, que el gobierno ya no esté secuestrado por una minoría rapaz”.

López Obrador recordó que cuando sucedieron los hechos en Pasta de Conchos, donde quedaron sepultados 65 mineros, le pidió a Larrea ayudara a los familiares pero lo ignoró.