La vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo, ha viajado a Valencia para ofrecer una comparecencia con Ximo Puig, presidente del Gobierno valenciano, para explicar el operativo de recepción de los inmigrantes del Aquarius.

Los barcos que los transportan, tres en total, “llegarán escalonadamente”, ha anunciado Calvo, que ha detallado que la primera atención que recibirán será sanitaria para después pasar los mandos a Interior, ministerio que se encargará de evaluar la situación personal de cada uno a través de una entrevista individual.

“Las peticiones de asilo serán atendidas una a una”, ha añadido la vicepresidenta sobre la situación jurídica de los migrantes.

Un comité de seguimiento ayudará a coordinar su acogida, que supervisará el ministro de Fomento, José Luis Ábalos, desde Valencia.

Los menores, “en principio”, se quedarán todos en Valencia. A bordo del Aquarius viajan 123 menores sin acompañantes y 11 niños de corta edad. Son precisamente los menores y las mujeres los que más preocupan al Gobierno, ha dicho Calvo.

El objetivo es lograr una recepción “eficiente, respetuosa y solidaria”, según Calvo, que ha agradecido a las numerosas ciudades que se han ofrecido a acogerlo. No será desvelado, sin embargo, el destino de cada uno de ellos.