Desde hace varios años los ingresos del escritor Chuck Palahniuk se vieron afectados por falta de pagos a libros como El club de la pela, por parte de su agente literario, Darin Webb, contable de la reconocida agencia neoyorkina Donadio & Olson, quien se habría quedado con 3.4 millones de dólares de Palahniuk y otros autores.

“Todos los derechos de autor, todos los anticipos y los pagos de opciones para hacer películas que se habían acumulado en mi cuenta de autor de Nueva York, o se habían retrasado durante el proceso bancario, habían desaparecido. Adiós. Ni si quiera puedo saber de qué cantidad hablamos. Alguien confiesa en el video que había estado robando. No estaba loco”, escribió el novelista estadounidense y periodista, después de saber del gran desfalco del que había sido sujeto.

Palahniuk narra el terrible proceso que desde el 2001 empezó a padecer, pues recuerda echarle la culpa de esto a diferentes factores, entre ellos que los libros ya no se vendían como antes, que la crisis acechaba y la piratería estaba acabando especialmente en sus populares novelas.

Cuenta que ha sido una temporada difícil, pasándola muy mal. De hacer largas giras firmando libros, en las que él mismo se pagaba a veces los desplazamientos y llevaba golosinas o caramelos para que la gente se acercara para desear una firma, había comenzado a dejar de salir de su ámbito más cercano, ya que no podía permitirse ningún gasto extraordinario.

Sus allegados, describe Palahniuk, llegaron a pensar que se estaba volviendo arisco y huraño pero es que no tenía dinero para hacer la vida social de antaño y, además, dudaba de su éxito y de su posición literaria. El autor de Asfixia detalla también que en su infancia, cuando salía con su familia de vacaciones, siempre dejaban la puerta del hogar abierta, pues no había nada que robar. Así que ahora, aunque asegura que el desfalco lo deja sin nada, de algún modo lo hace sentirse halagado.

Agrega que, pese a estar cerca de la bancarrota, es rico, pues sus amigos y lectores se han ofrecido a ayudarlo desde que se descubrió el robo. Y destaca que confirmar que existía un robo le enseña “que no está loco, ni está solo”.

Se sabe que el fraude de Darin Webb se destapó luego de que otro autor tenía que recibir 200 mil dólares como anticipo de su novela, se quejó a la editorial de que el dinero no llegaba, pasando por encima del agente. La investigación policial descubrió que se había robado millones de dólares. Según The New York Post, reveló que el contador Webb mandó mails al joven autor con explicaciones falsas de por qué no había recibido este dinero, la misma táctica que utilizaba con Palahniuk.

Varios medios afirman que Webb ha sido arrestado y se encuentra bajo custodia policial. El subdirector del FBI William F. Sweenwy Jr. anunció que tal y como se denuncia, Webb era responsable del bienestar financiero de la agencia cuyas cuentas supervisaba, pero en lugar de cumplir con sus responsabilidades fiscales, dedicó su tiempo a estafar a sus víctimas.