En la mayoría de los conflictos y crisis internacionales, los niños son el núcleo poblacional más endeble. Es por esta razón que la Organización de las Naciones Unidas exigió a Estados Unidos que deje de separar a los niños migrantes de sus padres que llegan a ese país en busca de refugio y amparo. La ONU afirmó que el interés de los niños siempre tiene que ser el primero, pues la mayoría de estas familias que salieron de Guatemala, Honduras y El Salvador, lo hicieron huyendo de la inseguridad.

La portavoz de la Oficina, Ravina Shamdasani, explicó que “los derechos de los niños siempre deben ser prioritarios y estar por encima de cualquier política migratoria”, y aprovechó para pedir a la administración estadounidense que “deje de criminalizar a los inmigrantes, y que comience a ayudarles”.

La representante del organismo internacional agregó que su oficina “aboga por soluciones administrativas para los inmigrantes indocumentados “y que busquen alternativas a la custodia de los niños”.

Las autoridades estadounidenses detienen a los adultos y los encarcelan, al tiempo que los niños son retenidos en centros de internamiento para refugiados. Cuando los padres han cumplido una sentencia, los hijos a veces son deportados junto a sus progenitores o permanecen con ellos, según sea el caso.

“No hay nada normal en detener a los niños, siempre constituye una violación de sus derechos”, recalcó. “La separación de las familias es una intromisión ilegal en la vida familiar”, dijo la portavoz.

Por su parte, el portavoz de la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), William Spindler, pidió proteger la unidad de la familia como  un derecho fundamental de los refugiados. “La unidad de la familia es sacrosanta y siempre debería ser preservada en el interés de los niños y de la sociedad como un todo”.

También enfatizó que Honduras, Guatemala y El Salvador experimentan altos niveles de violencia “y los niños son a menudo el objetivo de esta violencia”, y recordó que la detención debería ser siempre “la última opción”.

Finalmente, reivindicó el derecho de los migrantes a exponer sus casos y a solicitar protección internacional.