El presidente de Rusia, Vladímir Putin, y el de Estados Unidos, Donald Trump, se reunirán en territorio neutral en la que será su primera cumbre bilateral, buscada desde hace tiempo por ambos con el objetivo de mejorar las maltrechas relaciones entre sus países.

Putin y el asesor de Seguridad Nacional estadounidense, John Bolton, han mantenido un encuentro de dos horas en Moscú para concretar los detalles de una esperada cita que podría celebrarse en Viena o Helsinki. “Se ha elegido para la cumbre un lugar muy cómodo tanto para Rusia como para EEUU. Se trata de un tercer país”, dijo a los periodistas el asesor de Putin para Asuntos Internacionales, Yuri Ushakov.

La fecha y el lugar de ese encuentro se anunciarán mañana jueves de forma simultánea por el Kremlin y la Casa Blanca, precisó poco después Bolton al ofrecer una rueda de prensa en la sede de la agencia Interfax en Moscú. Adelantó que será por la tarde y durará varias horas, incluirá un cara a cara, seguramente un desayuno de trabajo y una rueda de prensa conjunta para informar de los resultados.

Por su parte, Trump dijo que será “probablemente después” de la cumbre de la OTAN, prevista para el 11 y 12 de julio en Bruselas. “Probablemente nos reuniremos en algún momento alrededor de mi viaje a Europa” en julio, para visitar el Reino Unido y asistir a la cumbre de la OTAN, subrayó el mandatario estadounidense.

Las relaciones entre los dos países atraviesan su peor momento desde la desintegración de la Unión Soviética, sobre todo después de la anexión de Crimea por Moscú, la injerencia de Rusia en el conflicto de Ucrania y el respaldo del Kremlin al régimen sirio de Bashar al Asad.

“Debo constatar que las relaciones ruso-estadounidenses no pasan por su mejor momento. Ya lo he dicho públicamente y lo vuelvo a decir ahora: creo que esto se debe en buen medida a una aguda lucha política interna dentro de Estados Unidos”, dijo Putin al recibir a Bolton en el Kremlin.

El líder ruso expresó su “esperanza” de que se puedan dar los primeros pasos “para restablecer plenas relaciones sobre la base de la igualdad y el respeto”.

El jefe de la Casa Blanca, agregó Bolton, “considera que esa reunión personal de alto nivel será beneficiosa tanto para Estados Unidos como para Rusia, y servirá para reforzar la paz y la seguridad en todo el mundo”.

Es sabido que dos de los asuntos que más preocupan a Putin de la política de Washington son las sanciones económicas contra Rusia y el despliegue del sistema antimisiles estadounidense cerca de las fronteras rusas. Al respecto, Bolton confirmó hoy en Moscú que la postura de la Casa Blanca en las dos cuestiones es inamovible.