Ricardo Muñoz Munguía

Es común encontrarse con opiniones, tanto en la vida cotidiana así como, por supuesto, en las redes sociales, de que tanto Igualdad y Equidad son lo mismo. La semana pasada tratamos el aspecto de la “Igualdad”, el que difiere de la “Equidad”. Estos conceptos atienden a posturas, si se quiere, paralelas pero es de insistir que son distintos en su esencia.

Equidad: esta cualidad indica principalmente que a cualquier persona se le debe dar el mismo trato y las mismas condiciones para que sus circunstancias favorezcan a todos del mismo modo. Para ilustrar con palabras sencillas pero efectivas, propongo exponer esta idea con el ejemplo que utilizó el Dr. Víctor Amaury Simental Franco en el foro: “Mujeres con perspectiva de género” que se llevó a cabo recientemente en la Universidad Nacional Autónoma de México: mencionó que Equidad es ofrecer las mismas condiciones como el supuesto caso de tres personas que tuvieran como tarea ver al parejo por encima de una barda pero cada una de ellas tuvieran distintas estaturas, entonces, la más alta podría ver bien, la segunda tendría que brincar y la tercera aunque brincara no podría asomarse; es así que para ello se les tendría que dar banquitos pero no a los tres sino sólo a dos, tanto para el de estatura media como para el de estatura baja, claro, también con la diferencia de tamaño para uno y otro, con la intención de que los tres quedaran a la misma altura para que estuvieran, ahora sí, en las mismas condiciones.

Otros tantos ejemplos podrían ilustrarse aquí pero más allá de eso, se debe atender, debe contener los elementos necesarios para que se obligue un verdadero panorama donde se puedan ver a la misma estatura todos. Durante la campaña presidencial pasada se comentaron varias propuestas, diversos puntos de vista, diferentes preocupaciones…, quizá lo que más sobresalió fue la inseguridad y el desempleo, pero no se queda ahí el aporte, pues es sumamente importante afianzar las nuevas —o sólo aplicarlas— actitudes que tengan como principal interés el construir una mejor convivencia pero apuntalándola con puntos legales. Una nueva campaña que engloble y proponga el respeto como base de todo proyecto constructivo, y lo fundamental es la equidad, que es igualdad. Cierto es que la gente se deja ver molesta, con temor, con desinterés…, algo en lo que tiene que ver con las voluntades que forman nuestra cultura, la que debe concientizar con cosas tan aparentemente sencillas, como es el manejar con respeto, tirar la basura en su lugar, atender bien a las mascotas, tener atención por el otro, pues un individualismo nos ha abierto el pecho y ahora lo creemos como algo genético. En fin, preocupaciones que van más allá de todo gobierno, que casi en su totalidad, ésas sí, tienen que ver con lo particular.

Igualdad y Equidad, algo en lo que aún queda mucho por hacer para equilibrar estos conceptos en la sociedad y desde la ley, como lo enmarcó el experto en Ciencias en Medio Ambiente y Desarrollo. Algo en lo que todos tenemos responsabilidad y en lo que debemos actuar día a día.