Como lo anunció la noche del 1 de julio, Andrés Manuel López Obrador, ganador de la elección a la Presidencia de la República, se reunió con Enrique Peña Nieto en Palacio Nacional.

Después del encuentro, que tuvo una duración de más de una hora, López Obrador dio detalles de la reunión que calificó de “cordial, amistosa e importante”.

Dijo que buscarán una transición “ordenada y pacifica” para que no haya sobresaltos y haya confianza. El tabasqueño indicó que será “respetuoso” con la autonomía del Banco de México. “No habrá injerencias en lo que respecta al cambio monetario”.

Destacó que se hablaron temas que corresponden al Banxico como, por ejemplo, el equilibrio macroeconómico. López Obrador prometió continuar con los programas que están en proceso y que se “garantice la paz y tranquilidad”.

Aseguró que también se habló sobre el TLCAN, el Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM), la reforma energética, presupuestos y seguridad.  El líder de Morena indicó que llegó a la conclusión, junto con Peña Nieto, de llevar a cabo la transición una vez que el Tribunal Electoral emita el fallo y lo nombre presidente electo de México.

Agradeció la actuación del presidente Enrique Peña Nieto en el proceso electoral. “Cuando interviene el Presidente no hay una auténtica democracia. Yo lo padecí. Tengo que reconocer que el presidente Peña fue respetuoso”. Calificó las votaciones del pasado 1 de julio como “libres y limpias”.

Sobre una segunda reunión con el líder del Ejecutivo, López Obrador dijo que Peña Nieto lo invitó a asistir a la Alianza del Pacifico que se llevará a cabo el 24 de julio, en Puerto Vallarta. “Esperamos que para ese entonces ya sea presidente electo”.

En cuanto al tema del NAIM, aseguró que los equipos trabajarán en conjunto “en el análisis de lo que más convenga”. De misma forma se trabajará para la revisión del TLCAN.  “El equipo que está a cargo de la negociación del TLCAN no lo ha hecho mal. Vamos a ayudarles en este tiempo con un equipo que va a informarse de lo avanzado y de lo que deba hacerse con el propósito de lograr la firma de este acuerdo”.

Reveló que pronto se tendrá una reunión, no con el presidente de Estados Unidos, “sino con el jefe del Departamento de Estado”.

Informó que a mediados del mes de septiembre recorrerá el país “hasta finales del mes de noviembre, para presentar en cada región de México el Plan de Desarrollo Integral“.

López Obrador reiteró su compromiso por cambiar el régimen corrupto. “La gente quiere un cambio verdadero y eso es lo que nosotros vamos a llevar a la práctica (…) lo que nos motiva a luchar es cambiar esta amarga realidad que se vive en nuestro país”. Continuó con su promesa  de convertir Los Pinos en un espacio para las artes y la cultura. “No voy yo a vivir en Los Pinos”. Asimismo, insistió que no usará el avión Presidencial ni los helicópteros. “Cuando tenga que viajar lo haré como siempre lo he hecho, en aviones de líneas comerciales”.

El ganador de la elección del 1 de julio indicó que el Estado Mayor Presidencial no va a desaparecer y tampoco estará a cargo de custodiar al Presidente de la República.

Antes de la reunión con el presidente Peña Nieto, el candidato de la coalición “Juntos Haremos Historia” dijo que no hará uso de guardaespaldas: “Eso significa que los ciudadanos me van a cuidar y me van a proteger y que los medios van a actuar con orden para que de esta manera no esté yo rodeado de guardaespaldas”, afirmó.