Arthur Huang es un ingeniero estructural, arquitecto y pionero de soluciones de materiales de construcción, especializado en aplicaciones de reciclado de basura post-consumo para ayudar a cambiar el consumo masivo a un modelo de ciclo cerrado, con esa iniciativa a logrado crear junto con su equipo, objetos de mueblería, ropa, zapatos, anteojos y hasta construcciones con material reciclable, como EcoArk, una de sus construcciones más reconocida, ubicada en Taipei, Taiwan.

El impresionante edificio fue construido con 1.5 millones de botellas de plástico PET, con tres pisos de altura, cuenta con un anfiteatro, una sala de exposiciones y una pantalla de agua recogida durante los períodos de lluvia, para el enfriamiento del interior. Los diseñadores promocionan el edificio como “el más ligero del mundo, móvil y respirable” e insisten en que es lo suficientemente fuerte como para soportar tifones y terremotos.

“El gobierno quiere que el negocio se deshaga de los desechos, que sea responsable de ellos, pero el problema es que no hay tecnología para reciclarlos”, aseveró Huang, para el diario La Nación, después de preguntarle sobre este ambicioso trabajo que fue encargado el año 2007 por el grupo Far Eastern Group, con un precio de alrededor de tres millones de dólares y sobre la base de tres objetivos: “Reducir, Reutilizar y Reciclar.” 

El proyecto fue finalizado en el 2010 y se utilizó como sede de la exposición Taipei Int’l Flora Expo. El Taiwanés, de 40 años, ofrece en cada una de sus obras una estética atractiva, y que hace olvidar a las personas que están ante algo hecho de basura. El EcoArk posteriormente se convirtió en un museo público. 

Junto con su empresa Miniwiz, Huang se ha transformado en uno de los líderes mundiales en tecnología de reciclaje post consumo en Asia y otras partes del mundo; su prestigio lo ha llevado a colaborar con empresas reconocidas internacionalmente, como la empresa Nike.

“Estos productos son prototipos que pretenden inspirar a las compañías sobre el valor que se esconde en su basura”, afirma el también galardonado por la National Geographic, por ser un explorador emergente; así como del Premio de Innovación que otorga el Wall Street Journal, en Hong Kong.