Miles de simpatizantes de Nicolás Maduro marcharon en Caracas para expresar su apoyo al presidente de Venezuela tras el supuesto atentado contra él este sábado. Maduro, que salió ileso, ha acusado directamente de este ataque a su homólogo colombiano, Juan Manuel Santos.

La movilización, que fue convocada por el gobernante Partido Socialista Unido (PSUV) y promocionada a través del canal estatal VTV, partió de un punto en el centro de la capital venezolana y llegó hasta el palacio presidencial de Miraflores.

El presidente de la oficialista Asamblea Nacional Constituyente (ANC), Diosdado Cabello, insistió en señalar a la oposición política por el atentado contra el jefe de Estado y les recriminó la falta de condena ante este hecho. “Le pedimos a los sectores de la derecha que piensen un poquito antes de hacer las cosas, antes de quedarse callados ante un hecho como este que pudo haber estremecido los cimientos de todo este país, de todo este continente, solo por la ambición de poder de un pequeño grupo”, expresó.

Maduro interrumpió el sábado un acto con militares en el centro de Caracas después de que varios drones con cargas explosivas detonaran en las cercanías de la tarima presidencial, según explicó el Gobierno, y ratificara este lunes el Ministerio Público.

Por estos hechos hay hasta ahora seis detenidos, cuyas identidades se desconocen por el momento. Además, el fiscal general, Tarek Saab, ha asegurado que también “se ha establecido el sitio en que los autores materiales se alojaron en los días previos al intento de magnicidio”.

Reiteró además que estas cargas explosivas ocasionaron “heridas a siete” oficiales de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB, policía militarizada) “así como daños a edificaciones cercanas”.

La Fiscalía imputará a los seis detenidos por delitos de traición a la patria, homicidio intencional calificado en grado de frustración, homicidio frustrado y lesiones graves, lanzamiento de artefacto explosivo en reuniones públicas, terrorismo, asociación para delinquir y financiación al terrorismo.

Con todo, cuatro horas después del incidente, Maduro culpó a Santos, que posteriormente desestimó estas acusaciones calificándolas de “insólitas”.